John Hughes y Molly Ringwald: Una pareja perfecta

Este día es aniversario de nacimiento del director John y la actriz Molly, personajes que curiosamente hicieron una muy exitosa mancuerna en el cine. Aquí les contamos de qué va su popular, pero corta relación.

Para el año 1984 John Hughes ya llevaba algunos años escribiendo guiones para películas, pero ese sería el año en el que se embarcaba en su primer viaje como director con la comedia juvenil Se Busca Novio, para es aventura contrató a la entonces adolescente Molly Ringwald que venía saliendo de una nominación al Globo de Oro como artista joven por Tempest.

Se Busca Novio mostró a Samantha Barker, una chica que debido a los intensos preparativos por la boda de su hermana mayor, su familia olvida su cumpleaños número 16. Y así, sufriendo en silencio por el olvido de sus padres y el hastío que le provocan las constantes insinuaciones sexuales de un estudiante de su secundaria, comienza a anhelar la atención del típico chico popular de su escuela.

Ésta se convertiría en la primera colaboración exitosa entre Ringwald y Hughes, filme que se convertiría en una de las películas más recordadas de la carrera de ambos; eso hasta que volvieron a hacer mancuerna con la película El club de los cinco.

En 1985, con la estela del éxito de Se Busca Novio, Ringwald y Hughes se unieron una vez más para filmar El club de los cinco, cinta cuyo guión cuenta la leyenda tomó sólo dos días en escribirse. En ella cinco estudiantes clásicos de secundaria se unían un fin de semana para cumplir con el castigo por diversos crímenes estudiantiles.

Fue así como "la rara", "el nerd", "la chica bonita", "el deportista" y "el chico problema" dieron inicio a la representación de una nueva generación; 30 años más tarde el filme sigue siendo el proyecto más importante de los actores y del propio director. La recreación de los personajes y sus historias siguen vigentes a la fecha, haciéndola una cinta por la que no corre el paso del tiempo.

Fue con esa película y en ese año que Ringwald se consolidó como la cara de los actores de su generación. Su popularidad incrementaba día a día. Los excesos nunca le llegaron, pero sí los miles de fans y los amores adolescentes con los artistas de la época.

Llegó 1986 y con Molly Ringwald aún en su adolescencia. Hughes escribiría La Chica de Rosa, primera cinta de ambos que él no dirigiría. De acuerdo a la actriz está es la película que más disfruto en su tiempo con Hughes. El beso que cierra el filme lo reconoce como el favorito de su filmografía.

En ese momento no lo sabían, pero esta película se convertiría en su última colaboración. La Chica de Rosa mostraba a una joven de preparatoria de un barrio pobre del pueblo, trabajando en una tienda de discos decidiendo entre el amor de un acaudalado compañero de clase, desafiando todas las reglas de la sociedad o su amigo de toda la vida, con raíces muy similares.

Esta sería su relación de trabajo menos exitosa, pero siempre memorable. Terminando producción y con Ringwald llegando a la mayoría de edad y deseando roles más maduros y un ímpetu por alejarse de las comedias juveniles, rechazó la oferta de Hughes de protagonizar Some Kind of Wonderfull de 1987 lo que puso furioso a Hughes y terminó su fructífera relación.

Años después se plantearía la posibilidad de hacer una secuela de El Club de los Cinco, marcando el décimo aniversario, en donde los protagonistas se reunirían para ver cómo resultaron sus vidas, pero la débil relación entre el artista y su musa impidió todo proceso.

Molly Ringwald famosamente rechazó los papeles en Mujer Bonita y Ghost, La Sombra Del Amor que servirían como trampolín para Julia Roberts y Demi Moore, mientras que Hughes seguiría trabajando como guionista hasta su muerte en 2009.