Llega a la pantalla grande una historia escrita y dirigida por Hugo Lara Chavez, la cual relata el caso de un matrimonio conformado por Manuel (Fernando Luján / Labios Rojos) y Adelina, (Carmen Maura / Volver). Ellos disfrutan ampliamente de su jubilación ya que después de mucho tiempo logran estar por fin en paz y disfrutar de la felicidad de estar los dos solos después de haber vivido toda su vida cuidando y educando a sus hijos, pues ahora ellos por fin viven sus propias vidas. Todo parece marchar a la perfección, pues tienen nuevos amigos y sobre todo se disfrutan mucho el uno al otro, sin embargo, un buen día, por azares del destinos los tres hijos deciden regresar a casa a vivir con ellos y a compartir más tiempo juntos, lo cual descontenta completamente a Manuel y a Adelina ya que en cuanto sus hijos llegan a la casa toda la paz y la tranquilidad que existe cuando ellos vivían solos se desvanece. Manuel y Adelina al estar hartos de que sus hijos alboroten la casa y que todo sea caprichos, discusiones y peleas, deciden hacer lo posible para echarlos de la casa y regresar a tener esa tranquilidad que tanto habían añorado los últimos años. El director Hugo Lara Sánchez, sin duda alguna, logra llevar a los cines una comedia mexicana que hace que las peleas entre familia parezcan divertidas y sobre todo, la combina con la reflexión en torno a cómo deberían de ser más valorados los padres por todo lo que han hecho por sus hijos y todo lo que dan por ellos a lo largo de sus vidas, pero no solo ellos sino cualquier ser humano, pues Lara Sánchez deja muy en claro ese mensaje de que a veces no nos damos cuenta de lo importante que es también como hijos ver por los padres.