El Laberinto del Fauno, de Guillermo del Toro, ¿qué dijo la crítica en su estreno?

Con El Laberinto del Fauno - 95% Guillermo del Toro abordaba el final de la inocencia de una manera frontal, una inocencia corrompida por la llegada del fascismo. El universo de la película está cimentada sobre secretos y portales que conectan el mundo real y el mundo de los cuentos. Adopta aquí la luz mortecina de la luna en lugar de la calidez del color ámbar de sus películas anteriores –Cronos - 89%, Mimic - 61%, El Espinazo del Diablo - 92%, Hellboy - 81%- y firma una obra bellísima y triste, como esa nana cantada por Mercedes (Maribel Verdú) a la pequeña Ofelia (Ivana Baquero) al final de la película, a la niña despierta y vivaz que un día por (literal) acto de magia, se ve atrapada en un mundo de fantasía al que pronto deberá de acostumbrarse para sobrevivir a la crueldad de Vidal (Sergi López), un capitán franquista actual esposo de su madre.

Puede interesarte: Guillermo del Toro: sus mejores películas según la crítica

Como es habitual en la cinematografía del director mexicano, el monstruo no es lo que creemos. Además de los fantasmas, y todas las criaturas fantásticas tan queridas por el autor, los insectos aquí son transformados en hadas responsables de guiar a Ofelia de un mundo a otro. Son las embajadoras de ese nuevo mundo del que la jovencita es su princesa. Un fauno (Doug Jones), una insólita criatura le explica que un reino mágico la espera pero sólo podrá regresar si consigue superar tres pruebas antes de la luna llena. Asustada al principio la niña tendrá que enfrentar el carácter malicioso de Pan y eventualmente enfrentar la muerte. El fauno resulta ser una figura beneficiosa, mientras que el verdadero monstruo se esconde bajo la figura del capitán fascista que concentra su odio en Ofelia.

No dejes de leer: Consejos de Guillermo del Toro para crear monstruos memorables

A partir de aquí, lo extraño se vuelve su vida cotidiana en un universo que le es completamente ajeno. Deberá lidiar con un entorno que sobrepasa su imaginación y mercadear con faunos, sapos gigantes, llaves mágicas y dinastías de leyenda, y recorrer un camino de ida, de vuelta y finalmente, de ida, a una realidad que antes temía, pero que era necesaria para su crecimiento. Finalmente, la primera máscara del amor que un niño tiene que enfrentar en su vida, es la fascinación por lo fantástico —incluso con todo lo terrible que conlleva:

Y se dice que la princesa descendió al reino de su padre, y que ahí reinó con justicia y bondad por muchos siglos, que fue amada por sus súbditos, y que dejó detrás de sí pequeñas huellas de su paso por el mundo... visibles solo para aquel que sepa adónde mirar.

Continúa leyendo: FICM 2017: Guillermo del Toro “La Forma del Agua es un homenaje a los marginados”

El Laberinto del Fauno - 95% fue considerada por la crítica en su estreno como la versión más oscura de Alicia en el País de las Maravillas - 79% para adultos, un drama de guerra y fantasía en el que ambos mundos son atroces, despiadados, tenebrosos y casi deshumanizados. En 2006 fue nominada al Óscar como Mejor Película Extranjera y Roger Ebert la consideró la mejor película de fantasía desde El Mago de Oz - 99%. El reciente estreno de su nueva cinta, La Forma Del Agua - 92%, y su éxito en la meca de Hollywood al adjudicarse el premio a Mejor Director y Mejor Película en la pasada premiación de los Óscar, resulta muy oportuno revisar qué dijo la crítica durante en el estreno de la mejor producción del cineasta tapatío de acuerdo a la crítica:

Carlos Boyero, de elmundo.es:

En esta película, extraordinariamente pensada y ambientada, en la que la lluvia convive con el misterio, en la que te hacen sentir el miedo y la magia, la villanía extrema y la dignidad del acorralado, en la que provocan mucho más terror los sádicos de uniforme que los que habitan las sombras de las cavernas, te sientes hipnotizado por la poderosa representación del mal implacable y del resistente bien, te conmueves con la inocencia de esa niña predestinada y odias al ogro que la persigue. Cuando estás dispuesto a gozar de las ensoñaciones salvadoras de esta fábula, su muy perverso creador te hace cerrar los ojos y estremecerte con la imagen del maligno cosiéndose su desgarrada boca.

Almudena Muñóz Pérez, de La Butaca:

La desesperanza que desprende “El laberinto del fauno” es la que corresponde a la muerte como una parte ineludible de la vida, y en ambas la fantasía resulta igual de increíble y oscura. Por saber combinar estas razones, la forma visual y argumental con las intenciones de un cineasta creativo, “El laberinto del fauno” se apaga como un ensueño contradictorio. Dulce y roto. Un trozo de lúgubre hermosura en una industria española incapaz de ver con nuevos ojos las historias de siempre.

Jordi Acosta, de Fotogramas:

El laberinto... es otra aproximación poética y subjetiva a las heridas abiertas en la Guerra Civil española: en este caso, las heridas infectan y se ramifican en el universo imaginario de una niña lectora de cuentos de hadas, que terminará por descubrir que su aparente refugio fantástico no es más que el espejo del horror real.

Ann Hornaday, de The Washington Post:

Artísticamente ambiciosa, técnicamente impresionante, compleja en cuanto a la moral, consciente de que desafía los estándares definidos. Véanla, y celebren la audacia de un director comprometido con el cine.

Cine y Cine:

Siguiendo con su excelente trayectoria, Guillermo del Toro nos vuelve a obsequiar con una gran película basada en la Guerra Civil Española, tras ‘El espinazo del Diablo’. En esta ocasión, el director de ‘Hellboy’ ha querido dotar al film de una doble trama. Doble trama desarrollada en el mundo real y en el mundo mágico frecuentado por Ofelia. De esta forma, nos narra una historia mágica en la que se mezclan constantemente la ficción y la realidad, aunque, a decir verdad, en muchas ocasiones no sabremos que es real y que no lo es.

Richard Roeper, de Ebert & Roeper:

Del Toro ha hecho muchas películas muy imaginativas. Creo que esta podría ser su mejor película de todas.

Kenneth Turan, de Los Angeles Times:

La violencia no es usada de forma morbosa, sino para crear un mundo que podamos temer, porque la película es fiel a su frase "La inocencia tiene un poder que la maldad no puede resistir", es imposible dejar de ver El Laberinto del Fauno.

Peter Travers, de Rolling Stone:

Es horripilante y conmovedora en la manera en la cual una pequeña niña ve la guerra a través de sus ojos, es una película grandiosa.

A.O. Scott, de The New York Times:

El Laberinto del Fauno es una fábula política disfrazada de cuento de hadas. O tal vez es al revés.

Ramón Balcells, de muchocine.net:

El laberinto del fauno no es (como dicen por allí) la Alicia en el país de las maravillas española, sino un cuento totalmente poético y simbólico con verdaderas escenas de terror. Lo que Guillermo del Toro quiere contarnos, y ahí va el mensaje de la película, es lo siguiente: la realidad se impone ante la ficción. Es una moraleja, si así se puede decir, terrible, pero increíblemente original si se sabe tratar bien. Y aquí del Toro se supera, en la creatividad. Cada secuencia tiene un significado, real o imaginario, cada hecho tiene su principio y su final, cada escena muestra su lado más oscuro y brillante a la vez.

No dejes pasar: La Forma del Agua | top de críticas, reseñas y calificaciones

También puede interesarte: Alfonso Cuarón y Alejando González Iñárritu celebran el triunfo de Guillermo del Toro en los Óscar con unas emotivas palabras