Alec Baldwin enfrenta nueva demanda por la tragedia sucedida en el set de Rust

La trágica muerte de Halyna Hutchins durante la filmación de Rust sigue causando muchos comentarios en Hollywood. Buena parte de la industria pide debatir sobre el uso de armas y municiones reales en las producciones, mientras que otros han tomado la decisión de evitarlas a toda costa en sus series y películas. Por otro lado, la figura de Alec Baldwin es la que quedó al centro de todo el asunto. El actor fue el que disparó e hirió a la fotógrafa y al director Joel Souza, por lo que la cuestión sobre su responsabilidad es un tema que no se dejará ir pronto.

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Alec Baldwin se presentó a la policía y habló abiertamente del hecho con ellos; de igual forma, después de un cierto tiempo también compartió unas palabras para confirmar que está en contacto constante con la familia de Hutchins para ayudarlos como sea posible, y que si las autoridades pertinentes consideran que deben hablar de nuevo con él, lo hará sin poner obstáculos. En general, el público considera que el actor es en parte una víctima de las circunstancias, pues existen profesionales que se encargan de revisar las armas y las municiones que se usan en las filmaciones.

Después de la tragedia, se comenzó a investigar la producción misma de Rust. Según se sabe, varios miembros del crew dejaron la locación por falta de seguridad, otro miembro fue mordido por una araña y podría sufrir una amputación, el asistente de director no forma parte del sindicato, y la experta en armas era una novata. En otras palabras, se comienza a entender que, suceso tras suceso, todo fue un efecto dominó. Como Baldwin era también productor del proyecto ahora se vuelve a analizar su figura, pero ya como posible responsable que debe enfrentar consecuencias por sus decisiones.

Ahora, The Hollywood Reporter revela que Alec Baldwin está siendo demandado por Mamie Mitchell, supervisora del guión en el set, y quien extiende su acción legal contra los otros productores de Rust. Según los documentos oficiales, Mitchell fue la primera en llamar al 911 cuando ocurrió el accidente, y ahora asegura que ella también salió herida y que la producción entera estaba llena de fallas y abuso contra su persona y otros miembros del crew.

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De manera específica, Mamie Mitchell afirma que resultó lesionada con el disparo, y alega que la agredieron, que de manera intencional le causaron angustia emocional y que deliberadamente la hirieron. En su demanda, la supervisora también reveló que el guión, en esa escena en particular, no requería el disparo de un arma en lo absoluto:

Se discutió sobre tener tres tomas […] No había nada en el guión sobre el disparo de un arma por parte de Baldwin ni de ninguna otra persona.

Mitchell también explica que, contra todos los protocolos de seguridad, nadie avisó que habría un disparo, no había suficiente protección de plexiglass, y que nadie les ofreció ver la escena en los monitores desde lejos o fuera de la iglesia donde tuvo lugar el accidente. Además, ella considera que Baldwin sí tiene culpa por no revisar la pistola:

Alec Baldwin debió asumir que la pistola en cuestión estaba cargada a menos y hasta que le demostrarán a él o él mismo revisara que no estaba cargada. No tenía derecho a depender de la supuesta información del Asistente de Dirección sobre ser una “pistola fría” [vacía]. El señor Baldwin no puede esconderse detrás del Asistente de Director para tratar de justificar el hecho de que él mismo no revisó la pistola.

La supervisora también jura que Baldwin está familiarizado con los protocolos de seguridad, así que manejar armas no era extraño para él y debió proceder de manera adecuada y profesional, pues no puede decir que ignoraba esa información.

Lo que suena todavía peor es que en los documentos se afirma que durante la filmación de Rust ya habían sucedido otros dos disparos accidentales, donde por suerte nadie salió herido, y que eso debió ser suficiente para cambiar los protocolos de la producción. La demanda contra los productores justamente es por recortar los gastos poniendo en riesgo la integridad del crew y el talento. Hasta el momento, Alec Baldwin no ha contestado a estas acusaciones, pero siendo una cuestión legal, en la que Mitchell pide una cantidad importante por lo sucedido, es posible que esto se resuelva en un juicio o de manera privada entre ambas partes.

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