Por qué Parque Jurásico no necesitaba tener secuelas ni convertirse en franquicia

Sin lugar a dudas, Parque Jurásico - 93% es uno de los mayores éxitos de taquilla del cine. La adaptación que hizo el director Steven Spielberg de la novela de Michael Crichton es una aventura aterradora y emocionante repleta de algunas de las ideas mejor ejecutadas del cineasta, ya que la tecnología de vanguardia que llevó a los dinosaurios a la pantalla grande fue en ese entonces algo nunca antes visto. El público respondió yendo en masa, y en su primer fin de semana rompió un récord de taquilla establecido el año anterior por Batman Regresa - 81% y también superó a E.T., El Extraterrestre - 98% como la película más taquillera en esa época.

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Sus momentos llenos de suspenso, personajes convincentes, una historia a gran escala y sus efectos visuales revolucionarios la convirtieron en una de las películas más innovadoras e influyentes de todos los tiempos. Naturalmente, para un estudio con casi mil millones de dólares más en el bolsillo, convertir esta gran película en una franquicia solo era cuestión de tiempo. Spielberg regresó para dirigir la primera secuela, El Mundo Perdido: Jurassic Park - 52%, a la que siguió Parque Jurásico III - 49% en 2001. Mundo Jurásico - 71% actualizó la serie de películas tras su estreno en 2015 y Jurassic World: El Reino Caído - 58% llegó unos años después, con Jurassic World: Dominio - 54% en camino para un lanzamiento en el verano de 2022.

Esta última promete concluir la serie, pero los ejecutivos de Universal probablemente se alinearán alrededor de la franquicia para ver qué más se le puede hacer. Después de todo, mucha gente va a verlas y la recaudación que han tenido no nos permite decir lo contrario. Sin embargo, todas las secuelas de Parque Jurásico no han logrado justificar su existencia, porque Parque Jurásico es una película que no necesitaba secuelas. Mientras que películas como Star Wars se abren intencionalmente a infinitas secuelas que exploran su vasto universo ficticio, esta contó su historia en su totalidad y exploró los temas a la perfección en la primera película.

Como era de esperar, dada la taquilla y el éxito de la crítica (la película ganó tres premios Óscar), Universal Pictures comenzó a trabajar en una secuela. Y luego otra secuela. Y luego, finalmente, algo que inicialmente se creyó era un reinicio, pero en realidad eran más secuelas. Estas películas posteriores se estrenaron con diversos grados de éxito de taquilla, pero en el nivel de la historia principal, ninguna de ellas se acercó a igualar las alturas de Parque Jurásico. ¿Por qué? Porque Parque Jurásico nunca debería haberse convertido en una franquicia en primer lugar.

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Lo que hace que la película original sea impresionante y efectiva es la mezcla de asombro y terror que ocasiona. Sabemos que Spielberg es el rey de las películas taquilleras, pero también es uno de los mejores directores. Películas como Tiburón - 98% y Parque Jurásico no son películas de terror, pero ambas usan elementos del género con un efecto tremendo. Después de que la primera película cerró la puerta de su propia premisa con Hammond dándose cuenta del error de sus caminos y prometiendo cerrar el parque, la mayoría de las secuelas han deambulado por la isla llena de clones de dinosaurios, arrojando ideas de historias aleatorias a la pared para ver lo que se pega.

Lo más cerca que ha estado cualquiera de las secuelas de Parque Jurásico de igualar la grandeza del original es Mundo Jurásico, que finalmente ofreció un nuevo giro a la premisa al explorar un parque de dinosaurios en funcionamiento lleno de turistas, lo que aumenta la tensión cuando los dinosaurios escapan porque hay muchas más vidas en juego. Pero esa película termina siendo una decepción debido a sus personajes débiles y unidimensionales y muchos estiramientos en la lógica. Además, Jurassic World allanó el camino para la peor película de todas (hasta ahora): El Reino Caído. Después de comenzar con la conocida configuración de la secuela jurásica de tipos militares que engañan a los científicos para que los lleven a la isla para brutalizar a los dinosaurios, esta tropieza de un punto de trama estúpido al siguiente.

Revela que la isla ha sido un volcán activo todo este tiempo, luego sigue las reglas de "el piso está hecho de lava" para representar la erupción, luego se convierte en una película tibia de casa embrujada en su segunda mitad cuando los dinosaurios sobrevivientes son llevados a una mansión para ser subastados por varios millones de dólares cada uno. Esta película está unida como si los realizadores tuvieran diferentes ideas de historias, a medias, que no pudieron desarrollar en películas completas y simplemente las metieron en el mismo guión.

Spielberg hizo la película original como una película de monstruos, como lo había hecho anteriormente con Tiburón. El tiranosaurio rex está enmarcado de la misma manera que Godzilla o King Kong, y podría decirse que se ha vuelto tan icónico dentro del canon de los monstruos cinematográficos. Todos los componentes de esta adaptación tienen mucho más suspenso, emoción y compromiso emocional que cualquier otra película de superhéroes de hoy en día. En un mundo con más y más películas sin inspiración que no exigen ser vistas en la pantalla grande, Parque Jurásico todavía se presenta ante grandes multitudes porque es un espectáculo para la vista. Las secuelas, desafortunadamente, no han hecho más que enterrar este legado.

Una de las desventajas de las historias jurásicas es que requieren mucho tiempo para configurar la acción, y si no lo tienen realmente no van a salir bien. En la primera película, Spielberg usa el tiempo con maestría para exponer todo lo que el espectador debe saber antes de avanzar. En Jurassic Park, esta exposición funciona porque mejora la acción en lugar de obstaculizarla. Por ejemplo, el diseño de los velocirraptores es aterrador por sí solo, pero su presencia en la pantalla no sería tan eficaz si el filme no hubiera explicado con horripilantes detalles cómo los raptores se comen a las personas.

Y si saber todos estos detalles no es suficiente para saber por qué Parque Jurásico nunca debió extenderse con secuelas (y una franquicia), la escena final proporciona el cierre emocional para concluir la historia para siempre: el Dr. Grant cambió genuinamente su discurso durante la película y mira por la ventana del helicóptero, donde observa pájaros (técnicamente dinosaurios) volando en una bandada. Este fue el final perfecto para la historia. Es simple, pero envuelve todo de una forma elegante. El guión de ata todos los cabos sueltos, por lo que no hay lugar para una secuela, pero el estudio no iba a permitirse que un éxito en taquilla se quedara sin más, ni siquiera cuando una gran parte del elenco original se negaba a regresar, y nada les iba a impedir hacer una secuela de la que fue la película más taquillera de todos los tiempos.

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