Rodaje de Joker 2 se complica por malos tratos a extras

DC lleva varios años tratando de resolver el caos en sus producciones, y aunque ahora las cosas lucen más prometedoras, todavía falta tiempo para ver si realmente ofrecerán algo de calidad a largo plazo. Durante estos años, la empresa tuvo algunos estrenos relevantes que abrieron su propio camino para formar una franquicia. Guasón - 91% es uno de los mejores ejemplos, y aunque de inicio no se pensó como el comienzo de una saga, su éxito fue tal que la productora no pudo dejar pasar esa oportunidad. Joker: Folie à Deux ya es uno de los estrenos más esperados aunque su rodaje no ha sido nada sencillo, pues parece que la producción no respeta mucho a los extras.

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Joaquin Phoenix terminó ganando un Oscar por su trabajo en Guasón y el público decidió que todavía quería ver más de él. Es cierto que esta versión del villano no es la más fiel a los cómics tradicionales, pero sí toma referencias claras a historias relativamente más recientes y se apoya en la construcción de que tanto Batman como sus enemigos se adaptan a la sociedad que los lee. De esta forma seguimos al protagonista y logramos sentir empatía por él a pesar de sus arranques de violencia y su forma tan deprimente de ver el mundo, y para ello no necesita la figura del héroe.

El actor no quería formar parte de una franquicia y ya había despreciado antes otras ofertas para unirse al mundo de los superhéroes, pero Guason prometía ser una única historia que iba más allá de la tendencia popular. Al final, él aceptó firmar para una secuela porque todavía no podía dejar ir al personaje y consideraba que había algo más que contar sobre su vida.

Luego de muchos rumores, hace meses se confirmó el desarrollo de Joker: Folie à Deux, una secuela que contará con la participación de Lady Gaga como Harley Quinn y que mostrará a Guasón encerrado en un manicomio. Entre teorías sobre su trama y la confirmación de que será un musical, la cinta ya está generando altas expectativas, y aunque ahora que está en plena filmación se esperaban filtraciones sobre los protagonistas, lo que realmente ha llegado al público es un grave problema sobre la producción que podría detener el rodaje por completo.

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Según TMZ, la producción de la secuela se ha visto envuelta en un escándalo porque los extras ya se quejaron abiertamente de los malos tratos que están recibiendo en la filmación y que incluyen no poder ir al baño cuando lo necesitan ni tomar agua justamente para evitar cortes para ir al sanitario. Al parecer, los extras están en el set mientras el equipo de producción monta la cámara, algo que puede tomar hasta una hora, y en ese tiempo se les pide que se queden ahí sin moverse para nada.

Un extra también reveló que después de regresar del baño tomó un vaso de agua y una persona de la producción lo regañó porque tendría que ir al baño otra vez en poco tiempo. Ante este trato, otros extras que temen perder su empleo se han quedado callados ante la presión, pero reconocen que es constante con un asistente incluso reclamando en voz alta que no entendía por qué tenían que ir al baño ni por qué tardaban tanto cuando él podía pasar mucho tiempo sin ir. Aunque la filmación no se ha detenido por esto, sí ha sido un problema que ya llamó la atención de los medios y de la asociación que cuida los intereses de los actores.

Al parecer, se hizo un reporte oficial a SAG, quienes contactaron con la producción para arreglar el asunto y mejorar el trato a los empleados, pues el rodaje todavía tiene pendientes 5 semanas más de trabajo. Los ejecutivos de Warner no se han pronunciado al respecto, pero se sabe que están cooperando con SAG, que seguirá mandando elementos al set para revisar que todo esté bien. Esta no es la primera vez que esto sucede en una obra de Todd Phillips, pues durante la filmación de Guasón los extras también se quejaron de que los dejaron por horas encerrados en un vagón y al no poder ir al sanitario tuvieron que orinar en las vías del metro.

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