Drácula: Keanu Reeves se negó a insultar a Winona Ryder para hacerla llorar en una escena

Desde hace casi 30 años, la película Drácula, de Bram Stoker - 79% ha dado mucho de qué hablar, no solo por el reparto repleto de estrellas de la talla de: Gary Oldman (Las Horas Más Oscuras - 86%, The Laundromat - 50%, Tau - 29%), Winona Ryder (Experimenter - 87%, Línea de Fuego - 56%, Stranger Things - 96%), Keanu Reeves (John Wick 3: Parabellum - 98%, Replicas, Deep Web - 82%), o porque se supone que gracias a este filme estos dos últimos actores se casaron, o porque Francis Ford Coppola estuvo a cargo de la dirección, sino también por algunos enfrentamientos en el set y situaciones desagradables.

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Winona Ryder, quien en ese tiempo tenía 19 años y ya era una estrella consolidada en Hollywood, fungió como productora ejecutiva del filme, consiguiendo el dinero necesario para hacerlo realidad, así como proponiendo a Coppola como director, a Oldman como el Conde Drácula y a Reeves como el esposo de Mina Murray (vía Vanity Fair). Sin embargo, debido a la época, el trabajo de la actriz no fue reconocido más allá de lo que hizo en pantalla y todos los elogios fueron hacia el cineasta, quien fue reconocido también como productor.

Además de lo anterior, la actriz ha revelado que en la película vivió una de las situaciones más desagradables, pues para que llorara en una escena, el director comenzó a insultarla y le pidió al resto del reparto masculino que lo hiciera, sin embargo, no funcionó y actores como Keanu Reeves decidieron simplemente no ser parte de esto (vía Independent).

La escena en cuestión involucra a Mina Murray, interpretada por Ryder, despertando de un trance erótico y a Drácula transformándose en una pila de ratas, por lo que la actriz tiene que tirarse sobre la cama y llorar. Sin embargo, según lo que se ha contado en distintas ocasiones, las primeras tomas se veían forzadas, por lo que Coppola decidió pararse frente a la cámara gritando repetidamente "¡Puta!" para hacerla llorar de manera creíble.

El cineasta también intentó que el elenco masculino de la película se uniera a los insultos contra la actriz. Según lo que se había revelado en un inicio sobre esta escena que provocó tensión entre Coppola y Ryder, los actores sí habían participado, entre ellos Reeves. No obstante, en una reciente entrevista con The Sunday Times (vía Independent), la actriz contó que Keanu no lo hizo.

Para ponerlo en contexto, se supone que debía estar llorando. Literalmente, Richard E Grant, Anthony Hopkins, Keanu... Francis estaba tratando de hacer que todos gritaran cosas que me hicieran llorar. Pero Keanu no lo hizo, Anthony no lo hizo... Simplemente no funcionó. Yo estaba como, ‘¿en serio?’ De alguna manera hizo lo contrario.

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De esta manera, el querido Keanu Reeves continúa teniendo una trayectoria perfecta como uno de los actores más decentes, respetuosos y buenos del medio. El actor es conocido por ser una gran persona, siempre se ha mostrado agradecido con sus fans, a quienes les ha brindado una atención y trato inigualables cada vez que lo reconocen en la calle. Además, según lo que cuentan sus compañeros, es muy educado y siempre busca la manera de ayudar. Esta nueva revelación de Ryder deja claro que todo es verdad.

La actriz también contó que ella y Coppola están bien ahora, 28 años después de dicho incidente, pero que lo que la experiencia realmente provocó fue que la intérprete tuviera una larga y sólida amistad con Reeves.

Desde Drácula, los actores han trabajado juntos tres veces más en Una mirada a la oscuridad - 69% de 2006, The Private Lives of Pippa Lee de 2009 y Destination Wedding de 2018, la cual tuvo una muy mala recepción por parte de la crítica, algo que fue muy difícil de aceptar por parte de Ryder.

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