Serie documental de Jeffrey Epstein en Netflix revela que Bill Clinton visitó su isla de orgías

Netflix sabe que los escándalos son bastante lucrativos y entretenidos, es por eso que sus series documentales han adquirido una excelente reputación entre los usuarios de la plataforma. El gigante del streaming aprendió a sacar provecho de estos temas sin inmiscuirse en problemas de corte legal. Muy de vez en cuando, estos productos revelan hechos que no eran de conocimiento popular, y justo eso fue lo que ocurrió con Jeffrey Epstein: Filthy Rich. El reciente estreno de Netflix declara que el ex-presidente de los Estados Unidos visitó la famosa “isla de orgías”, propiedad de Epstein.

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Con una fortuna cercana a los US$ 600 millones, Jeffrey Epstein fue uno de los financieros más populares de Estados Unidos, famoso por sus vínculos con figuras de las altas esferas políticas y sociales. En julio de 2019 fue arrestado por tráfico de menores en Nueva York y Florida y para el 10 de agosto se anunció que había cometido suicidio en su celda del Centro Correccional Metropolitano, levantando una gran controversia entre los medios de comunicación. Las sospechas en torno a su muerte son bastante sospechosas, incluso Ricky Gervais lo menciona durante su monólogo de los Globos de Oro 2020, en el cual sugiere que Jeffrey no se suicidó, sino que fue asesinado.

Jeffrey Epstein: Filthy Rich se introduce en la vida llena de excesos del magnate. Sobrevivientes de sus atentados dispersos por todo el mundo hablan sobre la manipulación, el abuso y las cicatrices emocionales sufridas a manos de Epstein. Las historias exponen una red de tráfico sexual de poderosos facilitadores que finalmente condujeron a su arresto en 2019. La serie documental presenta a Steve Scully, un hombre de 70 años que trabajó en la isla en el área de mantenimiento de comunicaciones. El individuo revela que en una ocasión vio a Bill Clinton con Epstein en el lugar (vía La Prensa):

A veces había otras personas en la isla que eran muy importantes... vi a Bill Clinton sentado con Jeffrey en el porche de la sala de estar, que era el lugar favorito de Jeffrey. No vi a ningún otro huésped allí en ese momento. Solo pensé: ‘¡Hey, wow! Jeffrey está sentado con Bill Clinton'.

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Virginia Roberts Giuffre también aparece en el documental y confirma las palabras de Scully. Ella fue una de las víctimas más famosas de la red de tráfico sexual de Jeffrey Epstein, una sobreviviente que en los últimos años se ha dedicado al activismo en defensa de las personas que han caído en manos de abusadores. Giuffre declaró haber visto a Bill Clinton en la isla de Epstein, sin embargo, nunca observó un comportamiento inapropiado de su parte.

Se sugiere que Bill Clinton no se vinculó con la red de tráfico sexual de Epstein, sino que mantenía una amistad con él para estar cerca de Ghislaine Maxwell, con quien presuntamente mantenía una relación a escondidas. Maxwell era novia de Epstein y fue acusada por reclutar víctimas para el multimillonario. Las intrigas en torno a las dinámicas del trío señalan a Clinton como un visitante frecuente en la casa de Ghislaine en Nueva York.

Jeffrey Epstein ha muerto pero los misterios alrededor de su figura siguen estando presentes y son tan llamativos como siempre. Las redes de pedofilia entre las figuras importantes de la política y la sociedad se han convertido en una leyenda urbana que muy de vez en cuando no demuestra su calidad de verdad. Jeffrey Epstein: Filthy Rich se encuentra disponible en Netflix desde hoy 27 de mayo, está compuesto por cuatro episodios y es dirigido por Lisa Bryant. Las críticas son lo suficientemente atractivas como para hacernos mirar.

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