Midsommar: El Terror No Espera La Noche, de Ari Aster, ¿qué dijo la crítica en su estreno?

No hay nada acogedor en una película que transcurre en su mayoría a la luz del sol cuando se trata del director Ari Aster. Al igual que con El Legado del Diablo - 96%, su siguiente película conservó la línea de los cultos y relaciones que tuvieron destinos trágicos, al igual que ese lado grotesco y violento. Aunque su ópera prima presentó una historia en la que una familia es destruida por una antigua maldición que convierte a un joven en el inesperado amo y señor de un culto, Midsommar: El Terror No Espera La Noche - 98% toma en cuenta un festival de verano en una locación distinta y sigue a un grupo de jóvenes que asisten al evento sin saber que les espera una serie de asesinatos rituales.

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¿De qué trata 'Midsommar: El Terror No Espera La Noche'?

Su segundo filme, el cual llegó a cines en 2019, empieza con una tragedia cuando Dani (Florence Pugh), una estudiante de psicología, recibe un extraño correo de su hermana Terri, quien es bipolar. Dani tiene un novio llamado Christian (Jack Reynor), estudiante de antropología, quien usualmente es quien le brinda su apoyo en las situaciones difíciles. Sin embargo, nadie estaba listo para lo que ocurriría después: la protagonista descubre que su hermana ha asesinado a sus padres y a ella misma. La película salta unos meses después, cuando Christian se prepara junto a sus amigos para un viaje a Suecia. Josh (William Jackson Harper) y Mark (Will Poulter) se unen gracias a la invitación de Pelle (Vilhelm Blomgren), otro de sus compañeros.

Ese viaje se había mantenido en secreto porque iba a ser una salida para chicos, pero Christian termina invitando a Dani muy a su pesar y el de sus acompañantes, quienes se prestaban para ir a Suecia con la idea de conocer un país exótico y a chicas lindas. Por supuesto, en una película de Ari Aster lo mínimo que ocurre es una pesadilla y eso es lo que están por vivir. Así, los jóvenes llegan a una comunidad remota de aquel país para el festival Midsommar, que transcurre una vez cada 90 años y parece ser un evento desconocido para el resto del mundo. La única razón por la cual están al tanto de su existencia es gracias a su compañero Pelle, quien los invitó porque forma parte de esa comunidad.

La estancia de estos personajes en Suecia los cambia. La deprimida Dani de repente se vuelve más feliz, quizás por el encanto de las actividades que se realizan allí. Pero es aquí cuando la historia de Aster empieza a replegar sus trucos, puesto que empieza a convertirse en un acercamiento al miedo y alejarse de la percepción de la realidad en un lugar que aparenta ser de ensueño.

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¿Qué dijo la crítica de Midsommar: El Terror No Espera La Noche?

El consenso de la crítica describe a Midsommar: El Terror No Espera La Noche como una película ambiciosa, muy elaborada y, sobre todo, que pone al director Ari Aster como alguien que en este tiempo se está convirtiendo en un referente del género. Aunque la calificación que recibió la cinta no es tan alta como la del primer largometraje de este director, su puntuación refleja que una gran parte de las reseñas fueron positivas. Algunos críticos señalaron a la producción como “memorable” y una “pesadilla despierta” por la forma en que el cineasta juega con el relato.

Cabe destacar que este filme recibió también una versión extendida que le añade 25 minutos de metraje con versiones extendidas de algunas escenas que ya están presentes en el corte original, y añade más violencia e imágenes perturbadoras. La crítica de igual manera dijo que el filme podría haber sido mejor si se desarrollaban sus personajes secundarios, puesto que sus actores no pudieron hacer mucho al respecto por la forma en que están escritos. Del otro lado, está Florence Pugh con una de sus mejores actuaciones en el papel de Dani, gracias al cual se dio a conocer a otro tipo de público. Eso y más dijo la crítica de Midsommar: El Terror No Espera La Noche - 98%:

Manohla Dargis del New York Times:

Después de un tiempo, surge una inquietud improductiva mientras esperas que los personajes importen tanto como los movimientos sedosos y los detalles minuciosos.

Lindsey Bahr de Associated Press:

Midsommar es una pesadilla despierta y lo digo de la mejor manera posible.

Claudia Puig de FilmWeek (KPCC - NPR Los Ángeles):

Nunca, ni siquiera por un segundo, sentí la duración... Lo encontré tan inquietante y siniestro. Por momentos fue un poco desigual, pero es muy visible y te llega a la piel de una manera realmente espeluznante.

Stephen Romei de The Australian:

De hecho, es la sensibilidad cultural la que está en el corazón de esta película. No se trata de asesinos en serie, extraterrestres o seres sobrenaturales. Se trata de los humanos comunes y corrientes que conocemos como el Otro porque provienen de otro lugar.

Wenlei Ma de News.com.au:

El enfoque de Ari Aster hacia el cine de terror se filtra en tu subconsciente con gran efecto, persistiendo como un invitado no invitado.

Jake Wilson de The Age (Australia):

Incluso más que Hereditary, Midsommar vive en el límite donde el horror se encuentra con lo absurdo, provocando el tipo de risa que surge al no saber de qué otra manera responder.

Manuel São Bento de MSB Reviews:

Ya sea que lo ames o lo odies, Midsommar es memorable. Florence Pugh lleva la historia sobre sus hombros con una actuación sorprendentemente convincente, pero su elenco secundario no hizo mucho con sus personajes subdesarrollados.

Paul Kanieski de KSQD Community Radio:

Lo que es particularmente notable es la sensación de pavor que Aster puede mantener durante la mayor parte de las más de dos horas de duración de Midsommar. Esto a pesar de que prácticamente toda la historia se desarrolla bajo un cielo soleado.

John Brhel de Vague Visages:

Midsommar es todo bistec, sin chisporroteos, y no se aprenden lecciones reales aparte de, tal vez, "Que se joda tu novio que te hace mansplain".

Mark Serrels de CNET:

Ay dios mío. Qué película. Inolvidable.

Norman Gidney de HorrorBuzz:

No me gustó Midsommar tanto como aprecié su audacia y la habilidad que claramente se puso en su realización. Esta fue una impresionante obra de arte que abrazó el exceso con algunos resultados positivos.

Keith Garlington de Keith & the Movies:

¿Es una película sobre el duelo, la castración, la salud mental y el despertar espiritual? La película parece preguntar sin darse cuenta: “¿A quién le importa? Simplemente mire otra escena desconcertante en la que el espeluznante culto sueco hace algo más extraño”.

Brian Eggert de Deep Focus Review:

Aster utiliza una configuración doble que indaga en los sentimientos de ansiedad acerca de las comunidades remotas y su vínculo con una naturaleza salvaje, al mismo tiempo que presenta personajes cuyo drama interpersonal subraya cada situación potencialmente perturbadora de la película.

Kip Mooney de College Movie Review:

Un vertiginoso y divertido viaje al infierno.

James McMahon de NME:

La continuación de El Legado del Diablo de Ari Aster es una historia genuinamente inquietante de paganos que adoran la naturaleza.

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