Star Wars: Cómo Disney sacrificó la expansión de la franquicia para dedicarse a la nostalgia y el relleno

Antes del lanzamiento de Obi-Wan Kenobi - 95%, el actor Hayden Christensen dijo que le encantaría protagonizar un spin-off en el papel de Darth Vader. En vista de que Disney está dispuesta a producir historias de cualquier personaje que le traiga público antiguo y nuevo, una serie en su plataforma de streaming con este personaje no vendría mal. De seguro ya lo pensaron, o incluso podrían estar trabajando en ella y no lo sabemos. Hay otras series y películas que llegarán en los próximos años, y a finales de agosto Cassian Andor recibirá la luz de los reflectores en cuanto su propia serie se estrene. Podríamos seguir hablando de spin-offs, como Rogue One: Una Historia de Star Wars - 85%, que también tiene una historia que gira en torno a la primera película de la franquicia.

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Hasta ahora, muy entretenido y todo, lo único que ha estado haciendo la compañía que adquirió Lucasfilm hace una década es rellenar los huecos de la franquicia. Sin contar la trilogía de secuelas, donde tres películas se sienten “nada” en comparación con la cantidad de contenido que se viene, Disney se ha ocupado de dar más trasfondo a personajes existentes, y más trasfondo, y más. Los planes del estudio han sido básicamente responder preguntas que se originaron en Star Wars: Episodio IV - Una Nueva Esperanza - 93% y demás, que van desde ¿Quién exactamente robó los planos de la Estrella de la Muerte? ¿Cómo fue posible que nadie encontrara a Luke Skywalker en Tatooine? ¿Qué hizo Han Solo para obtener el Halcón Milenario? Algunas interrogantes han persistido en el tiempo, pero realmente no es que importara si no obtenemos respuestas.

De esta manera, Disney encontró la forma de recurrir a lo fácil, porque es más sencillo, aparentemente, tomar una franquicia adquirida, con muchísimos fans de todas las edades, y producir contenido en relación a lo que tanto conocen y aman que hacerlo con historias que realmente signifiquen una expansión a la historia. Ya lo hizo a medias con las secuelas, porque al continuar la Saga Skywalker presentaron nuevos mundos y personajes sin dejar de lado los actores originales.

Una de las claves del trabajo de George Lucas fue que las películas originales de Star Wars eran para niños. Siempre lo ha dicho, que son historias para niños de 12 años, y muchos de los fans actuales fueron al cine en 1977 cuando eran niños o adolescentes. Los villanos visten de negro y se ven amenazantes, los héroes salvan el día, hay robots geniales y algunas criaturas se ven tiernas. También hay un trasfondo que los más grandes entendieron mejor, pero eso no importa. Hay mucha acción y momentos inolvidables que son los que brindan más entretenimiento.

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Cuando salieron las precuelas, nuevas generaciones tuvieron la oportunidad de experimentar Star Wars por primera vez, y gracias a ellos es que esta trilogía está teniendo un resurgimiento ya que los niños de ese momento recuerdan las películas con nostalgia. Lo mismo sucederá en el futuro con las siguientes películas. Pero ahora, son esos niños los que ahora como adultos se han convertido en personas que no aceptan ideas o gente diferente en las historias con las que crecieron. Ya hubo un problema para ellos cuando vieron las precuelas y sigue existiendo porque la franquicia continúa expandiendo el universo y rellenando todos los posibles agujeros de películas anteriores. Hay un choque de opiniones porque eso es lo que hace Disney, mientras algunos fans no soportan que esta expansión toque lo que conocen.

Y aunque es genial de ver y algunos momentos que Disney nos ha dado ya son icónicos, aquellos proyectos de Star Wars que parecían nuevos e independientes se han visto abrumados por la expectativa de explorar el legado (es decir volver a lo mismo). La primera temporada de The Mandalorian - 91% brilló tanto por su premisa como por el hecho de que tuvo bastantes personajes nuevos con historias interesantes, pero la segunda tanda de episodios se vio opacada por un cambio de rumbo enfocado en apariciones especiales de otros personajes bastante conocidos de la franquicia (Ahsoka Tano, Boba Fett, Luke Skywalker en CGI), y condujo a un spin-off de Boba Fett que aunque estuvo entretenido no hizo más que solo ofrecer a los fans lo que hizo este personaje luego de haber terminado dentro del sarlacc.

Lo que realmente funcionó en la trilogía original desapareció para dar lugar a un festín de nostalgia y una exploración poco arriesgada de una propiedad conocida. El ingenio, la invención, el descubrimiento e historias impulsadas por la narración (y no por cumplir con más contenido) permitieron que cada una de las primeras películas cree y construya un universo en el que los fans pueden olvidarse de la realidad por unos momentos, pero ahora se está retrocediendo. Si bien podemos seguir mirando más cosas como Obi-Wan Kenobi - 95% que presentan nuevas locaciones y personajes que se convierten en favoritos, y con esto no se está diciendo que lo último que ha salido es malo, pero sí decimos que Disney se ha ido por lo fácil, que se vuelve agotador para el público.

A pesar de que también está en una posición difícil debido a que a algunos fans nada parece gustarles, la compañía, además de explotar la nostalgia como uno de sus pocos recursos, dice expandir la franquicia con cada lanzamiento nuevo. Sin embargo, está haciendo exactamente lo contrario: estrenar contenido en masa no significa que está ampliando el universo de Star Wars porque todo lo que hace es rellenar huecos de películas existentes y sacar spin-offs de cada una de estas series o películas. En lugar de expandir en todo el sentido de la palabra, Disney está tomando una pequeña parte de la franquicia para crear otra pequeña parte, y de esta parte ya reducida crea otra aún más pequeña.

No solo es más fácil recurrir a personajes amados por el público e historias con una base de fans establecida sino que en lugar de explorar una franquicia y construir nuevos rincones a lo que sus fans quisieran regresar una y otra vez, Star Wars está siendo tomada para la creación de contenido por montón con la promesa de que irá mucho más allá de lo que se ha visto antes. cuando la realidad es que Lucasfilm está ahogándose, literalmente, encerrándose a sí misma en un camino del que pronto podría no haber otra salida. Tiene salvación, pero Disney tendría que hacer exactamente lo contrario para empezar a cambiar. Dejar lo fácil por una construcción apropiada de mundos, historias y personajes que no necesitan la nostalgia y las referencias para demostrar que están en el mismo universo de personajes como Luke y Leia, podría representar un gran éxito para todos.

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