METE CRÍTICA | Después de un Kaiju, un Demon Slayer para reactivar el cine

Es curioso que a Godzilla vs. Kong - 85%, producción norteamericana protagonizada por el legendario Rey de los Monstruos que, apostando por el espectáculo, logró llevar de regreso al público a las salas luego del confinamiento requerido por la contingencia sanitaria; la que llegue a darle continuidad sea una propuesta venida directamente del país que viera nacer a dicho personaje, pasándole incluso por encima a la apenas entretenida nueva adaptación de Mortal Kombat - 74%, que rápidamente ha ido perdiendo gas en su paso por la cartelera. Nos referimos a Demon Slayer: El tren infinito - 100% (Demon Slayer: El tren infinito), que con su estilizada mezcla de acción, horror y fantasía épica, se quedó apenas a un paso de alcanzar la cima de la taquilla con 311,000 asistentes en su primer fin de semana, lo cual no es poca cosa si además tomamos en cuenta la reducción de la capacidad permitida actualmente por la salas, además de que se trata de la extensión de una franquicia, un pequeño detalle que podría haber alejado a gran parte del público no iniciado en la misma.

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Claro que todo esto no es un hecho fortuito, es resultado del trabajo que ha venido haciendo Konnichiwa, distribuidora identificada así por haber impulsado el festival del mismo nombre, que ha venido a cambiar la forma de ver el anime de este lado del charco, tanto por el público que, debido a la falta de otro tipo de vías estaba más acostumbrado a la piratería – hace menos de una década, si no eran Dragon Ball o El Viaje de Chihiro - 97%, este tipo de películas no llegaban a la pantalla grande en nuestro país-; cómo de empresas tipo Cinépolis.

A esta ultima gracias a que le han propuesto distintos formatos de exhibición, algunos de los cuales nunca los habían probado -enfocadas solo en fines de semana y haciendo un recorrido sucesivo en diferentes regiones, por ejemplo-, y que han sido determinantes para ir consolidando un mercado que tenían abandonado.

Es así cómo en este 2021, a pesar de las circunstancias provocadas por la pandemia, tuvieron espacio en la cartelera títulos como la oscura épica Fate/Stay Night: Heaven's Feel - III. Spring Song y la reflexiva pieza romántica Violet Evergarden: Eternity and the Auto Memories Doll - 100%, para dar una pequeña muestra de la diversidad de temas y estilos que ofrece el anime, hasta redundar en la ya mencionada Demon Slayer: El tren infinito - 100%, que al igual que sucedió con el reciente reestreno de El Señor de los Anillos - 50%, agotó sus entradas desde la preventa.

Claro, en este caso la atención de los medios y de la crítica especializada, fue mucho menor en relación al regreso de la trilogía dirigida por Peter Jackson, debido sobre todo a los prejuicios que aún se guardan. Un sector que todavía se niega a darse cuenta que aunque lo que el legendario Hayao Miyazaki y los estudios Ghibli han ofrecido es maravilloso, hay mucho más dentro de este tipo de cine, como en su momento lo demostraron las profundas y conmovedoras Una Voz Silenciosa - 91% y Tu Nombre - 98%, filmes igual traídos por Konnichiwa, pero bueno, esa es otra batalla que seguro también están en camino de ganar.

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