¿Por qué es tan grave que Sergio Goyri llamara “pinche india” a Yalitza Aparicio?

México está lejos de haber superado la discriminación racial. No es necesario que un grupo de celosos actores traten de ponerle el pie a otra mexicana para saberlo, pero sí ayuda mucho a visibilizar que el estigma con el que viven las personas de origen indígena y en general las personas de piel oscura. El más reciente en evidenciarlo es el actor Sergio Goyri que insultó a Yalitza Aparicio con un término discriminatorio.

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El éxito de Roma (99%), la historia de una mujer indígena que es trabajadora doméstica, ha pisado muchos callos entre la mediocre farándula mexicana que no soporta ver a Yalitza Aparicio, una mujer que debutó como actriz en el filme de Alfonso Cuarón, recibir premios, reconocimientos y menciones, pero quizá el más grave de ellos lo hayamos visto hoy cuando se hizo público un video en el que el actor Sergio Goyri llamó “pinche india” a la actriz.

Pero, ¿por qué retomar también este caso?, ¿qué lo hace diferente del supuesto grupo de actrices que buscaban boicotearla en los premios Ariel o de las diferentes celebridades que no disfrutaron su actuación? Es fácil y lamentable: Goyri no descalificó su mérito profesional, sino que insultó sus orígenes indígenas a partir de un desprecio claramente racial y clasista dirigido a su persona. Eso se llama discriminación. Aquí abajo pueden escuchar sus declaraciones.

A diferencia del resto, Goyri no emite una valoración sobre la interpretación de Aparicio sino que simplemente la descalifica por ser “india”, término despectivo que se usa para denominar a personas de orígenes indígenas. Pero todavía se atreve a vincularla, a través de una imitación todavía más preocupante, a un estereotipo de clase en el que las personas de ese grupo étnico son todas trabajadoras domésticas que se limitan a decir, según él, “sí señora, no señora”.

Una vez más, nos enfrentamos a esa falacia que parte del mismo prejuicio y se disfraza de crítica en la que Apareció, una mujer con estudios universitarios, “estaba actuando de sí misma” cuando la realidad es que no es así. Su personaje no es ella y si alguien así lo piensa es exactamente porque su interpretación resulta convincente y porque probablemente comparten el estigma de que una mujer morena de un pequeño pueblo oaxaqueño “debe ser” una empleada del hogar y no puede aparecerse en la alfombra roja del Óscar.

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Descalificar a una persona por su origen étnico, raza, orientación sexual, clase socioeconómica o género no sólo es moralmente inaceptable, sino que es anticonstitucional. Goyri, en su tremenda ignorancia que destaca todavía más por no mostrar la más mínima preocupación de ser filmado ofendiendo a la actriz, es un reflejo de lo mismo que Roma (99%) plantea: existen realidades muy diferentes en México que se delimitan por la raza y la condición socioeconómica.

Sergio Goyri no está haciendo otra cosa que probar que se siente amenazado por una mujer indígena, y por la historia que ella contó sobre una empleada doméstica. ¿Por qué le resultará tan incómodo que alguien distinto a él logre rebasar su carrera dos veces galardonada con el premio TVyNovelas? En su disculpa en Instagram asegura que "nunca hubo dolo" y que fue resultado "del calor de la discusión". Cabe preguntarse, ¿de dónde provino el insulto o el "calor" si no hay dolo en que alguien como Aparicio triunfe más que él?

Puntos extra para Gryffindor gracias al genio detrás de esta broma (aunque qué manchados con los monos).

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