Las escenas más memorables en el cine de David Lynch
Escenas memorables en la filmografía de David Lynch, a criterio del que aquí escribe
David Lynch ha forjado una carrera basada en su particular idiosincrasia, llena de imágenes y momentos que desafían lo convencional. Pocos realizadores han podido crearse un cuerpo de trabajo tan propio y a la vez alejado del sistema de estudios. Pese a que Lynch ha dirigido cintas por encargo, sus obras personales se mantienen como algo muy personal y que para nada se podrían confundir con las cintas de alguien más. Ahora que la crítica aclamó su regresó a la dirección, en este caso a la pantalla chica con Twin Peaks: The Return (94%), vale la pena recordar algunas de las escenas más memorables en la filmografía del director.
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Lynch ha dejado huella en el cine desde su opera prima y, esperemos, no se olvide totalmente de realizar un nuevo largometraje en un futuro cercano. A pesar de que su nueva serie puede pecar de excesivas escenas indulgentes no cabe duda que el cineasta aún posee un toque que deambula entre lo extraño y lo onírico. Por supuesto, todas las escenas aquí elegidas son a criterio del autor, inevitablemente habrá omisiones o escenas que al respetable les parezcan aún más memorables.
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Por el Lado Oscuro del Camino (60%)
La duplicidad de identidades es un tema constante en el trabajo de Lynch y la reciente encarnación de Twin Peaks tuvo bastante de eso. En esta cinta un enigmático personaje aparece y realiza un truco que, más adelante, servirá al personaje principal para llevar a cabo una venganza pasional contra su mujer, quien también habita en dos realidades.
La ganadora de la Palma de Oro de 1990 escandalizó a más de uno con su sórdido relato de amor y violencia. Desde las escenas iniciales Lynch deja claro que esta historia, protagonizada por Nicolas Cage en modo imitación de Elvis, no se va a andar por las ramas en cuanto al contenido gráfico se refiere.
La música siempre ha jugado un rol fundamental en el cine de Lynch, sobre todo las composiciones melancólicas o los temas de antaño con cierta aura especial. En su cinta de 1986 que catapultó a Dennis Hopper como villano por excelencia un tema de Roy Orbison suena para dar paso a varias escenas con un tono incluso espectral.
Sueños, Misterios y Secretos (81%)
La que es sin duda una de las escenas más memorables en la filmografía de Lynch es a su vez una de las más enigmáticas. La música juega también un papel esencial en toda la secuencia del Club Silencio, donde las protagonistas de este relato son espectadoras, junto a nosotros, de un espectáculo sin igual.
Desde su primera escena hasta su conclusión, todo Eraserhead se mantiene como una de las experiencias cinematográficas más inusuales que alguien podrá tener. El miedo a la paternidad y al compromiso parece ser el tema central de Lynch aunque por supuesto, como siempre dice el cineasta, lo importante más que una interpretación son las sensaciones que evocan sus imágenes.
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