Entrevista con Alberto Chimal: Sobre los retos de la escritura creativa y la influencia del cine en su obra

Con su peculiar mezcla de géneros, entre los que se incluye la ciencia ficción, la fantasía y comedia negra, el escritor mexicano Alberto Chimal se ha posicionado como uno de los escritores contemporáneos más interesantes de la literatura fantástica iberoamericana. Especializandose en el cuento y la novela, así como a la enseñanza de la escritura creativa, este exponente ha sido acreedor de múltiples reconocimientos tanto a nivel nacional como internacional por su dedicación a lo que es su más grande pasión en la vida. En tiempos recientes, Chimal participó como guionista en la antología Batman: El mundo, con una historia titulada «Funeral» en la que la mitología del caballero oscuro se fusiona con elementos de la cultura mexicana. También realizó el guión para el próximo thriller del director Carlos Carrera, Confesiones, que recientemente concluyó sus grabaciones y, por si fuera poco, publicó su segundo manual de escritura al lado de su cónyuge, la escritora mexicana Raquel Castro, que se puede encontrar en todas las librerías nacionales con el nombre de Cómo escribir tu propia historia.

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El equipo de Tomatazos tuvo la oportunidad de conversar con el renombrado autor como parte de las actividades del festival VIBRART 2022, donde nos reveló un poco de las inspiraciones que hay detrás de sus obras, el reto que implica escribir guiones cinematograficos y las películas que lo han acompañado en su odisea literaria.

Empezando la charla con el escritor revelando su fascinación por el trabajo del cineasta Wes Anderson, aprovechamos para preguntarle acerca de su experiencia realizando el guión para la cinta 7:19, La Hora del Temblor - 100% y la siguiente producción del cineasta Carlos Carrera, un proceso que obligó a Chimal a salir de la zona de confort. Él nos comentó:

Es una experiencia que a los escritores nos enseña mucha humildad, porque uno tiene que entender desde el principio que el texto que está realizando de ninguna manera es una obra terminada, es decir, es parte de un proceso que llevará a la existencia de una película en la cual intervienen muchas otras personas, voluntades creativas y formas de creación (…) ser una parte de ese proceso mayor es una parte a la que uno no está acostumbrado cuando está escribiendo una novela, es una experiencia distinta y solamente por ese cambio se aprenden muchas cosas. A veces, hay como cierta desconfianza o cierta incomprensión entre el mundo del cine y el de la literatura, pero yo creo que hay muchas formas de establecer contacto y de establecer buenas relaciones entre esos mundos. Yo he tenido el gusto de tratar con personas siempre muy decididas de lo que quieren y también muy dispuestas a escuchar, tanto productores, directores e incluso actores, y siempre ha sido una experiencia enriquecedora porque si uno está dispuesto a escuchar, también recibirá la oportunidad de ser escuchado y de llegar a un entendimiento.

Después de esto, conversamos un poco acerca de las adaptaciones literarias al cine. Él, como actor de ambos mundos, nos dio su punto de vista sobre este fenómeno y qué cosas debe tener una buena traducción a la pantalla:

Yo creo que las buenas adaptaciones son las que se sienten fieles al cine, no necesariamente fieles a la obra. A veces puedes tener una película en la que todos los actores dicen exactamente lo que viene en el texto y aun así puede ser un trabajo pésimo por esta especie de respeto absoluto al material, lo verdaderamente importante es que la cinta sea tan buen cine como sea posible. Y si se va a desviar del texto, que se desvíe de una manera que la haga buen cine, y si va a omitir cosas para que sea mejor cine, que las omita. Creo que tendríamos mucho mejor experiencia y mucho mejor cine si pudiéramos ver donde está esa diferencia, donde hay esa posibilidad de alejarse de la fuente para transmitir una esencia, una idea importante o una imagen significativa que capture aquello que nos hizo amar una historia inicialmente.

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Desde sus inicios, la obra de Alberto Chimal ha estado fuertemente influenciada por elementos de ciencia ficción y fantasía. Al cuestionarle sobre algunas de las películas que han tenido peso en su trayectoría, esto nos comentó:

Yo soy muy fan de toda la obra de Stanley Kubrick. Me parece que es uno de los grandes cineastas de toda la historia y desde aquella clásica 2001: Odisea del Espacio, El Resplandor, Barry Lyndon, Cara de Guerra o Dr. Insólito que son de mis favoritas, ahí hay varios elementos que yo si siento que vienen marcados claramente del cine de Kubrick a lo que yo escribo. Algo en partícular sería esta idea de hacer cortes o transiciones de escena a veces muy abruptas o muy efectistas pero que enfaticen mucho el cambio de una situación a otra, a mi me gusta mucho hacer eso. Otras obras que también han influido en mi trabajo son Blade Runner de Ridley Scott, La Masacre de Texas de Tobe Hooper, la cuál solo he soportado verla una vez en toda mi vida, El Gran Hotel Budapest de Wes Anderson y Brasil de Terry Gilliam. Me gusta mucho el cine y siempre estoy tratando de encontrar cosas nuevas e interesantes.

Sobre los elementos que hacen una historia de ficción algo convincente, Chimal opinó:

Yo creo que los elementos que hacen una historia convincente aplican para cualquier género o tipo de historia. Que haga un mundo consistente, que tenga personajes humanos, tiene que haber sentimientos, motivaciones o pensamientos que se puedan trasladar a nuestra propia experiencia. También es importante que tenga momentos memorables, un diseño que vaya más allá de la producción de molde. Una de las cosas más admirables que tiene Kubrick es que jamás hizo caso a la gente que quería que fuera más rápido, siempre se dio el tiempo para que cada toma resultara tan buena como fuera posible, por eso se acuerda uno del triciclo del niño del Resplandor, el baile de máscaras en Ojos Bien Cerrados o el bombardero en Dr. Insólito, porque hay un tiempo para planear esos momentos memorables.

Al preguntarle sobre cómo superar el bloqueo creativo a la hora de escribir, el autor dijo:

Cuando llega a pasarme, lo que trato de hacer es apartarme de aquello que no quiere avanzar. Ya comprobé que no tiene caso estar dándose de cabezazos contra el texto, más bien hay que hacer otra cosa, otro texto a lo mejor o un ejercicio, o en el peor de los casos levantarse y salir al mundo: caminar, ver el entorno que a uno lo rodea, pasear, distraerse, escuchar música, lo que sea. Y también hay que darle tiempo al proceso para que la idea se desarrolle sin forzarla.

Retomando su mención al entorno, al cuestionarle sobre qué es lo que inspira a Alberto Chimal a escribir en 2022, esto nos contestó:

Justamente ahora estoy metido en la historia relativamente reciente de México. Estoy buscando referencias de finales del siglo pasado que es donde se ambienta lo último que he estado escribiendo, tratando de investigar un poco lo que sucedía en mi infancia o en los años anteriores a mi infancia. Todos esos detalles que a mí me tocó vivir de cierta manera y que ahora están olvidados en el pasado me ha tocado estarlos recuperando como una especie de búsqueda de ideas o de inspiración en esa memoria, que por un lado es compartida con mucha gente pero por otro debe volverse a comunicar porque hay quienes no conocieron nada de eso.

Sobre su metodología de escritura y si esta presenta variaciones con cada una de sus obras, el novelista comentó:

Cada texto es una experiencia diferente pero hay ciertas constantes que uno puede ir creando a su alrededor para facilitarse la tarea de la concentración. Para mí, en circunstancias normales, lo que me funciona es: cuando ya aparté un momento del día para poder escribir, suelo empezar revisando pendientes muy inmediatos como el correo electrónico o cosas así durante un tiempo muy preciso, y después, a la hora de redactar, siento que puedo abordar esa tarea con libertad. Es una especie de hackeo que uno hace con su cerebro, y algo que a mí me ayuda mucho para ambientarme es poner algún tipo de sonido para empezar a trabajar, puede ser música o también una película, que ya vi más de una vez, la puedo poner como sonido nada más y me ayuda con la atmósfera, esa es una cosa rara que tengo. Un libro de cuentos de terror que hice hace años lo escribí escuchando de fondo El Resplandor, es una película que he visto como 40 veces pero que he oído como 200.

Para finalizar, el literato nos habló acerca del género le gustaría explorar en el futuro:

Justo ahora estoy escribiendo una novela histórica, eso es algo nuevo para mí. Y a futuro, me gustaría hacer en algún momento un libro que fuera como una especie de crónica familiar, aunque no necesariamente de mi familia. Me gustaría que fuera un libro que hablara sobre varias generaciones, dónde se pase de un personaje a otro y se viera como algo más extenso que la vida de una sola persona.

Puedes encontrar la masterclass "Escritura creativa: un acercamiento de los jóvenes a la creación literaria" impartida por Alberto Chimal y Raquel Castro para VIBRART 2022 aquí: VIBRART 2022 | Masterclass Creación Literaria

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