Bruceploitation: el ataque de los clones de Bruce Lee

La muerte inesperada de un ídolo de las multitudes puede generar todo tipo de reacciones, más en el séptimo arte. Desde la muerte del galán del cine silente Rodolfo Valentino, que causara el suicidio de varias de sus admiradoras hasta el deceso del eterno rebelde sin causa James Dean o Pedro Infante, el cine ha visto ir y venir a varias figuras prominentes que dejaron huellas imborrables. Bruce Lee, el astro de las artes marciales, fue uno de estos iconos que partieron antes de su tiempo y que a la fecha se mantienen como una figura inmortal en el imaginario público.

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Bruce falleció el 20 de julio de 1973, justo en la cima de su popularidad a nivel mundial. Los estudios de Hong Kong temían que el auge del cine de artes marciales terminara con la muerte de Bruce, por ello, varios productores comenzaron a realizar cintas en serie que tuvieran como protagonistas versiones apócrifas del actor: dobles que tenían cierto parecido físico y que eran capaces de realizar proezas de kung fu. Así surgieron nombres como Bruce Le, Bruce Li, Dragon Lee, Bruce Leung y muchos más clones. Incluso en su momento Jackie Chan, quien fuera doble en cintas del verdadero Bruce, fue promovido como "un nuevo Bruce Lee”, mote que el actor aborrecía y que eventualmente logró sacudirse.

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Las premisas de estas cintas generalmente involucraban no sólo elementos de artes marciales, sino amplias dosis de violencia, escenas de cama, desnudos femeninos y otras delicias que pueden encontrarse en el cine de explotación. Estos Bruce espurios peleaban contra ninjas, otros clones de Bruce, seres sobrenaturales, animales y, en el caso de The Dragon Lives Again, contra otros iconos del cine. Esta cinta hace caso omiso de cualquier ley de derechos de autor al mandar a Bruce al inframundo donde enfrentará a Zatoichi, James Bond, Drácula y El Hombre Sin Nombre de la trilogía de los dólares. Este Bruce contará con la ayuda de Popeye y otros personajes en una colisión de universos que ya quisiera DC poder armar.

Luego tenemos The Clones of Bruce Lee, cinta que reúne a tres clones para enfrentar a científicos locos y al mismo Bolo Yeung, el Hércules chino que compartió escena con el verdadero Bruce en Operación Dragón - 95%. Las cintas van de lo ridículo a lo sublime ida y vuelta y es fascinante ver hasta dónde eran capaces de llegar los productores. Cabe aclarar que estas cintas eran vendidas al resto del mundo como legítimas películas de Bruce Lee, en casos fragantes de publicidad engañosa.

Con la llegada del éxito de otros artistas marciales del estudio de los Hermanos Shaw y el ascenso del mismo Jackie Chan, la oleada de clones de Bruce Lee fueron puestos a dormir de forma permanente, aunque eventualmente algunas cintas de Hollywood de los 80 introdujeron sus propios clones, como los que se ven en The Last Dragon y No Retreat No Surrender, esta última con un joven Jean-Claude Van Damme como el villano en turno. En pleno siglo XXI la popularidad de Bruce no ha disminuido y es común ver su imagen en juegos de video, series de televisión, comerciales y en nuevos proyectos cinematográficos. En la historia del cine difícilmente pueden encontrarse otros ejemplos donde un actor haya creado una demanda tan fuerte de su imagen, una demanda que causara que los productores tuvieran que seguir maquilando activamente, aún después de su muerte. Definitivamente, el legado de Bruce será perdurable y como él lo decía, la llave para la inmortalidad es vivir una vida digna de ser recordada. El Bruceploitation se mantiene como una curiosidad histórica muy interesante en el séptimo arte.

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