Barbie: "Nada del mundo real", la regla para el diseño de Barbie Land

La exitosa película Barbie - 88% dirigida por Greta Gerwig ha cautivado al público con su ingeniosa mezcla de referencias cinematográficas y su peculiar mundo de fantasía. Sin embargo, detrás de la pantalla, el proceso de diseño y creación de Barbie Land resultó ser un territorio desconocido para la talentosa diseñadora de producción Sarah Greenwood y la decoradora de escenarios Katie Spencer, quienes han acumulado seis nominaciones al Oscar entre ambas (Orgullo y Prejuicio - 85%, Expiación, Deseo y Pecado - 83%, Anna Karenina - 63%). Juntas, enfrentaron el desafío de dar vida a este mundo mágico y surrealista.

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Las reglas de Barbie Land eran ni negro, ni blanco, nada del mundo real.

De acuerdo a sus palabras para IndieWire, Barbie Land, el lugar donde Barbie (interpretada por Margot Robbie) experimenta un viaje desde el feminismo hasta el mundo real, se inspiró en las casas de juegos de Barbie Dreamhouse y el modernismo de Palm Springs de mediados de siglo. La representación final del parque temático fue una interpretación de "las casas de ensueño de los últimos 70 años”. La creación de "este mundo herméticamente sellado donde no hay elementos, no hay viento, lluvia, fuego, electricidad o agua”, resultó ser un desafío único para el equipo de diseño, incluso tuvieron que prescindir de tonalidades específicas también.

La colaboración con Greta Gerwig, directora de la película, fue vital para entender la esencia de las muñecas Barbie y el concepto detrás de Barbie Land. Greenwood y Spencer tuvieron conversaciones con Gerwig sobre la naturaleza de las muñecas y la experiencia de estar en un mundo de juguetes. A pesar de la falta de conocimiento previo sobre Barbie, estas discusiones ayudaron a dar forma a los escenarios y la ambientación del filme.

Además de las casas de muñecas, los trucos de producción dentro de la cámara y en el plató permitieron crear una experiencia visual única en Barbie Land. El diseño compacto y la reducción de escala del 23% para los actores, junto con el enfoque en detalles táctiles de 360 grados, aportaron una sensación envolvente para el elenco y el equipo de producción.

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El diseño de los escenarios también presentó oportunidades para la creatividad en las piezas musicales. La fiesta de baile de Barbie, una mezcla de discoteca y Studio 54, capturó el amor de Greta Gerwig por Barbie y la década de los 80. La música y el baile se convirtieron en la principal forma de expresión para las muñecas, ya que no pueden comer ni beber en su mundo.

En contraste con el colorido y alegre Barbie Land, la casa de Weird Barbie (Kate McKinnon) se inspiró en la espeluznante casa de Boo Radley (interpretado por Robert Duvall) en Matar a un Ruiseñor - 92% y la icónica casa Psicosis - 96% de Alfred Hitchcock. Este diseño infantil de bloques y triángulos crea una atmósfera inquietante y desoladora, que refleja la personalidad de Weird Barbie, encargada de cuidar a las Barbies rotas.

El momento más emotivo ocurre cuando Barbie entra en una cocina de la década de 1950 en las oficinas centrales de Mattel. La mujer sentada en la mesa de la cocina es el fantasma de la inventora de Barbie, Ruth Handler. La recreación de la cocina incluyó varios easter eggs relacionados con la vida de Handler, como su casita de muñecas y su máquina de coser.

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La magia y los desafíos de Barbie Land se extienden a su diseño único y su construcción minuciosa, donde la imaginación y la atención a los detalles se combinan para crear un mundo de ensueño. A través del ingenio y la colaboración, Greenwood y Spencer han contribuido a dar vida a un lugar mágico donde las muñecas cobran vida y exploran la esencia de su existencia. La experiencia de diseñar Barbie Land ha sido un viaje surrealista y enriquecedor para estas talentosas creadoras, y su trabajo se suma al impacto cultural de la icónica muñeca en el cine y en el imaginario colectivo.