Muere Angelo Badalamenti, compositor de Terciopelo Azul, a los 85 años de edad

Toda gran historia, está acompañada de música. Las películas y las series de televisión cuentan con grandes personajes que forman parte de una situación que conectará de algún modo con la audiencia, pero hay otros elementos que se vuelven parte fundamental de la narrativa e incluso se convierten en un personaje más. Tal es el caso de la música. Quizá algunas producciones tomen sus temas musicales simplemente como relleno o para ambientar una escena.

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Pero también es capaz de ir mucho más allá cuando pasa de ser un elemento de fondo, a parte de la personalidad del personaje, como funcionaron las intervenciones musicales en Guasón - 91%, o también puede ser un personaje casi independiente como el Soul - 97%. Es por eso que los cineastas te toman el tiempo de elegir al mejor compositor, letrista y/o intérprete. Grandes estrellas en el mundo de las bandas sonoras le han otorgado un alma a cada producción, y sin ellos, quizá una película no habría tenido sentido.

Basta con pensar en títulos como Halloween - 92%, Tiburón - 98%, El Padrino - 100%, El Exorcista - 87% y muchos más para notar su importancia, pues con el solo nombre de cada una de estas cintas podemos recordar el tema que las identificaba. Esta tarde, quien fuera una de las mentes maestras detrás de la composición musical del cine ha partido, pero su legado permanecerá vigente cada vez que alguien se siente a mirar alguna de las producciones en las que participó.

De acuerdo al informe emitido por The Hollywood Reporter, Angelo Badalamenti murió a los 85 años de edad por causas aún desconocidas. Aunque inició en el mundo de la música acompañando a artistas como Shirley Bassey – quien es reconocida por haber sido la intérprete en haber cantado más veces una canción para la franquicia de James Bond –, la mayor parte de su exitosa carrera la forjó de la mano de David Lynch.

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El musico estadounidense de origen italiano brilló en la película Terciopelo Azul - 93%l estrenada en 1986, protagonizada por Isabella Rossellinii, Kyle MacLachlan, Dennis Hopper y Laura Dern. Originalmente, Badalamenti fue contratado como coach de canto para Rosellini y supervisor musical, pero al final fue elegido también para componer la banda sonora que sería una de las más aclamadas de la industria, además de que hizo una pequeña aparición en pantalla tocando el piano.

Fue entonces cuando nació su amistad con Lynch, y éste confiaría tanto en él que dejaría en sus manos la música del que se volvería un exitoso programa de televisión en 1990, incluso antes de tener algún adelanto del guión. Según como lo recordó Angelo en una pasada entrevista con la revista Spirit & Flesh, David sólo le fue diciendo qué intenciones y tonos buscaba narrándole una historia mientras éste improvisaba.

Las notas acaban de salir. David estaba atónito, al igual que yo. El vello de sus brazos estaba erizado y tenía lágrimas en los ojos: “Veo Twin Peaks. Lo tengo”. Le dije: “Me iré a casa y trabajaré en ello”. "¡¿Trabajar en ello?! No cambies una nota”. Y por supuesto nunca lo hice.

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Por la banda sonora de la serie consiguió ser nominado a los Premios Grammy en 1991, en 1999 fue nominado a los Globos de Oro por The Straight Story y en 2002 fue nominado en los mismos premios por Sueños, Misterios y Secretos - 81%. Fuera de las producciones cinematográficas y televisivas, destacó su colaboración con David Bowie para “A Foggy Day in London Town”.