Shia LaBeouf se arrepiente de Honey Boy por haber dado una imagen falsa de su padre: "él nunca me golpeó"

Shia LaBeouf es conocido por su trabajo en Hollywood pero también por sus escándalos, su estancia en terapia, posterior recuperación y proyectos esporádicos. Uno de los más reconocidos es Honey Boy: Un Niño Encantador - 91%, estrenada en 2019 y cuya función abarca mayormente el terreno terapéutico en la vida del propio actor. Ahora, pocos años después, Shia admite que aquella película le produce arrepentimiento por haber dañado, tal vez para siempre, la imagen de su padre ante el público y los medios internacionales.

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Dirigida por Alma Har'el y escrita por el propio Shia, Honey Boy presenta la historia de Otis, un niño de 12 años que descubre desde muy joven la fama de Hollywood. Su padre es un antiguo payaso de rodeo con diversos problemas y sin trabajo que decide convertirse en su guardián. Cuando Otis no está divirtiendo al público pasa el rato con él en hoteles de poca monta situados en las afueras de las ciudades a las que acude a grabar. La convivencia entre ambos es muy compleja: Otis se ve obligado a sufrir sus abusos mientras ambos intentan dar sentido a una relación que se reproduce en el tiempo a lo largo de más de una década.

Honey Boy recibió excelentes comentarios por parte de la crítica y celebró la actuación de Shia, quien interpreta a su padre mostrando una excentricidad y un dominio de las emociones más fuertes. Sin embargo, la película deja en claro que el sujeto fue un abusado con su hijo, algo que de lo que LaBeouf se arrepiente de haber escrito; así lo menciona durante su reciente intervención en el podcast Real Ones (vía The Wrap):

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Aquí hay un hombre al que he vilipendiado a gran escala. Escribí esta narrativa, que era simplemente una maldita tontería. Mi papá fue muy cariñoso conmigo toda mi vida. Fracturado, claro. Torcido, seguro. Tonto, seguro. Pero fue amoroso, estuvo allí. Siempre estaba ahí... y yo había hecho una gira de prensa mundial sobre lo jodido que estaba como hombre. Honey Boy es básicamente una gran historia de 'ay de mí', sobre lo jodido que está mi padre, y cómo lo perjudiqué. Recuerdo hablar por teléfono con él y me dijo: ‘Nunca leí estas cosas en el guión que enviaste’. Porque no puse esa mierda allí.

Shia LaBeouf trata de arreglar las cosas declarando que su padre, Jeffrey Craig LaBeouf, nunca fue abusivo con él; incluso menciona una llamada telefónica en la que habló sobre el tema y se hizo responsable de lo que mostró en cámara:

Mi papá nunca me golpeó, nunca. Me azotó una vez, solo una vez. Y la historia que se pinta en Honey Boy es que este tipo abusa de su hijo todo el tiempo. Escribí mierda que no era real. Entonces, cuando hablé por teléfono con él, asumí la responsabilidad por todo eso y supe muy claramente que no podía retractarme. Y mi vivirá con esta narrativa sobre él a escala pública durante mucho tiempo, probablemente el resto de su vida.

La carrera de LaBeouf comenzó en Disney Channel, muchas estrellas de Hollywood son conocidas por haber dado sus primeros pasos en esa empresa. Durante un tiempo, el camino de Shia lució brillante: se involucró en los proyectos más ambiciosos de Hollywood y se transformó en un actor bien pagado de la industria; sin embargo, su trayectoria se fue opacando por las múltiples polémicas de su vida, episodios con el alcohol y las drogas, o señalamientos de un temperamento difícil durante sus estancias en sets de rodaje. Poco a poco ha retomado los hilos de su vida pero el escándalo nunca se marcha del todo.

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