Kate Winslet recuerda que la intimidó el éxito de Titanic y que la prensa fue cruel con ella por su aspecto físico

El éxito de la película Titanic - 88% debería haber sido uno de los aspectos más destacados de la vida de la actriz Kate Winslet. En cambio, la fama que le dio se convirtió en una pesadilla, y la actriz finalmente reveló que su vida no fue color de rosa luego de haber protagonizado esta película, y aunque le cambió la vida de forma positiva, también se enfrentó al lado negativo y asegura que gran parte de la culpa la tuvieron los medios de comunicación del Reino Unido por volverse contra ella en el momento en que se convirtió en una superestrella internacional, lo que resultó en que ella se viera obligada a protegerse a sí misma y alejarse lo más posible del escrutinio público.

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Winslet tenía 22 años cuando Titanic llegó a las salas de cine y en ese entonces su papel le representó el salto a la fama y también la hizo recibir las miradas de, literalmente, todo el mundo. Algo que ella nunca esperó que llegara con su papel en la cinta de James Cameron, que coprotagonizó junto a Leonardo DiCaprio, fue la intensidad con la que muchos la criticaron y le hicieron “bullying”, que es la palabra que ella usó para referirse al comportamiento de otros hacia ella. Nos resulta un poco difícil de imaginar que ella pudo pasar por un muy mal rato, pero al mismo tiempo tampoco nos sorprende, y eso que en la época nadie tenía Twitter porque de lo contrario hubiese sido peor para ella e incluso para la película.

En su reciente paso por el podcast del también actor Marc Maron, llamado WTF with Marc Maron (vía Deadline), contó cómo fue que el escrutinio público le cambió la vida para siempre, y allí fue cuando señaló directamente a la prensa como la culpable no solo por referirse a ella de manera negativa sino porque al llegar a otras personas ayudó a fomentar que otros también la trataran de esa forma.

Entré en modo de autoprotección de inmediato [después de que salió Titanic]. Era como el día y la noche de un día para otro. Fui sujeta a mucho escrutinio físico personal, me criticaron mucho y la prensa británica fue bastante cruel conmigo. Me sentí intimidada, si soy honesta. Recuerdo haber pensado, “esto es horrible y espero que termine”. Definitivamente terminó, pero me hizo darme cuenta de que, si eso es lo que era ser famosa, no estaba lista para ser famosa, definitivamente no.

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Debido a que fue puesta en el centro de atención, a Winslet (Eterno Resplandor De Una Mente Sin Recuerdos - 93%, Sensatez y Sentimientos - 98%, Una Pasión Secreta - 61%) le tomó tiempo ganar algo de perspectiva sobre lo que le sucedió. Ella formuló un plan para evitar hacer grandes películas de Hollywood y tratar estratégicamente de encontrar cosas más pequeñas, con la intención de poder entender el oficio un poco mejor y de paso entenderse a mí misma un poco mejor; esto a la vez le permitiría mantener cierto grado de privacidad y dignidad como explicó en la misma entrevista. Dedicarse a proyectos mucho más pequeños fue su forma de preservar su cordura cuando la prensa británica era implacable con cada movimiento suyo.

Ser fotografiada por los medios cada minuto y ver cómo se acercaban muchos autos llenos de fotógrafos de la prensa sensacionalista británica que la estaban fotografiando mientras caminaba y compraba un poco de leche y un periódico, fue perturbador para la actriz que asegura que no estaba lista para ese nivel de atención.

Todavía estaba aprendiendo a actuar. Solo lo había estado haciendo desde que tenía 17 años. No estaba realmente preparada para hacer muchos trabajos importantes en Hollywood. Fue una gran responsabilidad. No quería cometer errores. No quería estropearlo, quería estar en ésa profesión durante mucho tiempo.

Sobre la presión de verse bien físicamente, dijo que sus profesores le habían dicho que estaba bien y que podía llegar a conseguir trabajo si le parecía bien “aceptar los papeles de chicas gordas” y eso la llevó a perder la confianza en sí misma, que con el tiempo volvió a ganar. En la actualidad, tiene una política de cero retoques en en sus fotos para campañas publicitarias y los pósters de películas en las que aparece.

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