Lucasfilm no permite que sus guionistas y directores sean creativos, revela nuevo reporte

David Benioff y D.B. Weiss anunciaron su salida de la franquicia Star Wars hace un par de días, generando una gran ola de reacciones en las redes sociales, la información fue reportada por Variety. Los creadores de Game of Thrones - 59% ofrecieron la razón de que su trato de exclusividad multimillonario con Netflix no les permitiría ajustar su agenda a los designios de Lucasfilm, sin embargo, el portal de noticias mencionado señala que ese no fue el único motivo de su salida, también tuvo que ver el hecho de que los ejecutivos de Lucasfilm no pensaban ofrecerles libertad creativa.

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Disney inició una nueva trilogía de la galaxia en 2015 con Star Wars: El Despertar de la Fuerza - 92%, una continuación de los eventos observados en Star Wars: Episodio VI - El Regreso del Jedi - 80%; esta película se convirtió en una de las más taquilleras de la historia y hasta hoy es más exitosa de toda la saga. No podemos decir lo mismo de Star Wars: Los Últimos Jedi - 91%, el episodio más divisivo de la franquicia debido a ciertas decisiones en torno al argumento. A pesar de que la cinta cuenta con una dirección sólida, el guión termina siendo lamentable y una causa bien justificada de ira entre los fans.

Durante los últimos años, las tendencias de corrección política han influido bastante en los productos de Disney, y claro que Star Wars no se queda fuera. Mientras que en el pasado tuvimos dos protagonistas hombres y blancos, las nuevas películas tienen como estrellas a una mujer de poder extraordinario, un antiguo stormtrooper interpretado por un actor negro, un piloto de ascendencia latina, un villano de belleza muy poco convencional, y una chica de asiatica-americana, con esto dan paso a que nuevas figuras tengan la oportunidad de verse representadas en pantalla, es decir, minorías. Esta estricta línea se ha convertido en regla para las producciones del ratón; por otro lado, Lucasfilm es la que se encarga de dar forma a los relatos, ella solo contrata directores y guionistas que trabajen de acuerdo a su método. Toda esta situación convierte a la empresa en una autoridad que no brinda demasiadas oportunidades a los creativos. Esto dice Variety respecto al caso de D&D:

Cuando Kennedy y su equipo presentaron a estos cineastas para unirse a la familia de Star Wars, las fuentes dicen que se les prometió una leve medida de control creativo. Sin embargo, varias personas con información privilegiada dijeron que las nuevas ideas eran comúnmente rechazadas ya que Kennedy y su equipo solo buscaban personas que se apegaran a la línea de la compañía. Si los desacuerdos sobre la dirección de una película se volvían demasiado intensos, por lo general, la persona dejaba el proyecto en lugar de intentar encontrar un terreno común

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Cuando George Lucas vendió Lucasfilm, creyó ingenuamente que Disney escucharía sus propuestas al momento de elaborar nuevas historias, pero si de algo estamos seguros es de que la empresa del ratón es despiadada. En el recién publicado libro de Bob Iger, The Ride of A Lifetime: Lessons Learned from 15 Years as CEO of the Walt Disney Company (El viaje de toda una vida: lecciones aprendidas en 15 años como CEO de Walt Disney Company), el poderoso ejecutivo mencionó que Disney hizo caso omiso a las idea de Lucas, logrando que el cineasta se sintiera traicionado.

En algún momento del proceso, George me dijo que había completado los esquemas para tres nuevas películas. Estuvo de acuerdo en enviarnos tres copias de los bosquejos: uno para mí, otro para Alan Braverman [vicepresidente ejecutivo, asesor general y secretario de Walt Disney Company] y uno para Alan Horn [co-presidente y director creativo de Walt Disney Studios], quien acababa de ser contratado para dirigir nuestro estudio. Alan Horn y yo leímos los bosquejos de George y decidimos que necesitábamos comprarlos, aunque dejamos claro en el acuerdo de compra que no estaríamos contractualmente obligados a adherirnos a las líneas argumentales que él había creado.

El ejecutivo se mantuvo firme en su posición de no ceder el control creativo de Star Wars ahora que tenían la marca bajo su poder.

George sabía que yo iba a mantenerme firme en la cuestión del control creativo, pero no fue sencillo para el aceptarlo. Y aceptó de mala gana estar disponible para consultas cuando se lo pidiésemos. Le prometí que estaríamos abiertos a sus ideas (no fue una promesa difícil de hacer, claro que estaríamos abiertos a las ideas de George Lucas), pero en los bosquejos no estaríamos obligados.

Star Wars: el ascenso de Skywalker - 61%, la gran conclusión de la trilogía, se estrena el 20 de diciembre.

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