México prefiere las comedias románticas y las cifras de taquilla lo demuestran

Es común que la producción, en cuanto al cine local, sea muy criticada por los habitantes de un país, y en un lugar como México, en el que se estrena gran cantidad de películas al año -en comparación con otros países latinoamericanos-, es lógico que hayan producciones de todo tipo dentro del ámbito cinematográfico, aunque hay un género en particular que ha llevado a los habitantes masivamente a las salas de cine el año pasado logrando recaudar cifras históricas.

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Las comedias románticas llenan las carteleras del cine mexicano contemporáneo y las estadísticas no solo confirman que estas películas son las que más cantidad de público atraen a las salas de cine en el país, sino que también indican que 2018 marcó un hito en cuanto a la asistencia del público con respecto a la películas mexicanas que se exhibieron a lo largo del año pasado.

Según lo demostrado por el Instituto Mexicano de Cinematografía (también conocido como IMCINE), el año pasado se consiguió una cifra histórica de asistentes a películas mexicanas con una cantidad de 30.5 millones de espectadores aproximadamente. Así mismo se reporta que la industria cinematográfica nacional alcanzó la histórica cifra de recaudación de $1.107 millones de pesos.

Pese a que los números son buenos, hay que destacar que son aún mejores debido a que la audiencia que acudió a las salas en México disminuyó en un seis por ciento, lo que indica que la mayoría optó por el cine nacional y esto ayuda a revitalizar la industria; aun así, el país ostenta el cuarto lugar de consumo de cine en el mundo.

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Dentro del top 10 de películas mexicanas, Ya Veremos - 50% se posicionó en el primer lugar con 4.1 millones de asistentes, lo que le permitió obtener $197 millones de pesos. La película de Pedro Pablo Ibarra cuenta la historia de un niño, de padres separados, que hace una lista de lugares para visitar y cosas por ver después de enterarse que debe someterse a una operación para no perder la vista. Esta cinta obtuvo la mayor cantidad de espectadores para una película nacional.

El enredo romántico dirigido por Marco Polo Constandse, que incluye una propuesta de matrimonio y una familia peculiar, es lo que se ve en La Boda de Valentina - 35%, que se llevó el segundo lugar en la lista con más de tres millones de asistentes durante su paso por las salas, generando ingresos por $159 millones de pesos.

La Leyenda del Charro Negro - 50%, del director Alberto Rodríguez, llegó al tercer lugar al haber conseguido más de dos millones de espectadores y una taquilla de $100 millones de pesos. De cerca le sigue la comedia de Luis Eduardo Reyes, Una Mujer Sin Filtro - 44%, que obtuvo la visita de 2.1 millones de asistentes y una cantidad de $103 millones de pesos por ingresos.

En la otra cara de la moneda están la película animada Ana y Bruno - 80% de Carlos Carrera, además de los largometrajes Eres mi Pasión - 18% de Anwar Safa , Bayoneta - 38%, Ayer Maravilla Fui - 90% de Gabriel Mariño, Marcianos vs. Mexicanos - 9% de Gabriel Riva Palacio Alatriste y Rodolfo Riva Palacio Alatriste, además de Tiempo Compartido - 95% de Sebastian Hofmann, que, aunque no lograron atraer la misma cantidad de espectadores a sus funciones, también fueron parte de los títulos mexicanos estrenados en este año.

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