La muerte en ‘The Last of Us’ suele ser como el café bien cargado: amarga, impresionante y necesaria para que funcione la trama. Pero incluso los creadores de la serie tienen un límite. La segunda temporada vino con un desfile de cadáveres, traiciones y sangre a chorros. Sin embargo, hubo una baja importante que NO llegó a la pantalla: hablamos de una perrita llamada Alice.
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Sí, HBO le sacó vuelta a la tragedia animal. Porque al parecer, el público puede tolerar que Ellie torture a Nora hasta matarla o que Abby le vuele la cara a Jesse, pero matar a un perro adorable es otro nivel de crueldad. Hollywood tiene sus reglas, y una de ellas es clara: no toques al perrito.
¿Quién es Alice en el videojuego ‘The Last of Us Part II’?
Alice no es cualquier lomito. Es una perrita de raza pastor alemán, entrenada para acompañar a Abby y su pandilla. Es valiente, leal, excelente jugando a la pelota y, por desgracia, termina en el lugar equivocado en el momento más tenso del videojuego
En la historia de ‘The Last of Us Part II’, Ellie se infiltra en el acuario donde cree que está Abby. Spoiler: no está. Pero sí están Owen, Mel y Alice. Cuando Ellie entra en modo sigilo, la perrita la ataca. Y como el juego no perdona, el jugador está obligado a matar a Alice si quiere seguir. NO es opcional. Y eso, por supuesto, desató un apocalipsis emocional en los fans.
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¿Cómo muere Alice y por qué fue frustrante para los jugadores?
A diferencia de otras criaturas de cuatro patas que puedes esquivar con sigilo, Alice descubre a Ellie y la ataca. Finalmente, la perrita es eliminada con cuchillo en mano, una decisión que el juego no permite esquivar; no puedes avanzar si Alice no muere.
Más adelante, cuando tomas el control de Abby, el juego te muestra a Alice como una buena perrita, leal y cariñosa. Juegas a la pelota con ella. El resultado es un balde de culpa. Porque sí, mataste a esa protectora bola de ternura sin saber cuánto la amaban sus humanos.
La decisión de los desarrolladores es obvia: si vas a enseñar que la guerra no tiene héroes, vas con todo. Y matar a Alice fue parte de esa lección. Pero al parecer, la televisión tiene otras reglas.
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¿Por qué la serie no incluyó la muerte de Alice?
Craig Mazin, creador de la serie, lo dijo sin rodeos en una rueda de prensa: “solo te dan un episodio para matar a un perro en la vida”. Él ya había rebasado la cuota en ‘Chernobyl’.
Bromas aparte, Mazin y Neil Druckmann sabían que la muerte en ‘The Last of Us’ puede ser dura, pero matar a un animal en acción real es demasiado gráfico, incluso para HBO. “No queríamos torturar a la audiencia”, explicó Mazin. Y con razón. Entre embarazadas abatidas, torturas dignas de Tarantino y adolescentes destruidas emocionalmente, añadir una muerte perruna habría sido el golpe de oscuridad final.
Además, perder a Alice en la serie también implicaba renunciar a la escena donde Abby juega a lanzar la pelota. Un momento que, aunque breve, humanizaba a los Lobos y rompía el molde de “los malos malísimos”. Sin esa escena, la historia pierde uno de sus matices más poderosos.
Aquí no hay héroes puros ni villanos de caricatura. Hay humanos tomando decisiones horribles en circunstancias peores. Por eso, eliminar la muerte de Alice en la serie es comprensible, pero no deja de sentirse como un agujero en el corazón de la historia.
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¿Cuándo se estrena la siguiente temporada de ‘The Last of Us’?
Por ahora, no hay una fecha confirmada. Pero no te preocupes, fan del dolor emocional, la tercera temporada está en camino. Solo hay que armarse de mucha paciencia.
Todo apunta a que la siguiente entrega llegará después de 2026, considerando el calendario de producción y las huelgas que sacudieron la industria en años recientes.
Lo único cierto es que, entre todos los personajes caídos en la segunda temporada, la ausencia de una perrita leal fue la que más nos rompió sin siquiera aparecer.
Y sí, Alice era una buena chica.
Con información de ScreenRant.
