‘Marty Supreme’ fue todo un desafío para Timothée Chalamet, tanto dentro como fuera del set de grabación. Hizo un intenso entrenamiento para convertirse en Marty Mauser, jugador de ping-pong que está dispuesto a todo con tal de alcanzar la cima del deporte. Kevin O’Leary, empresario conocido por ‘Shark Tank’ y actor debutante, reveló otro de los desafíos a los que se enfrentó Chalamet durante el rodaje.
Además del exigente entrenamiento físico y técnico, Chalamet tuvo que afrontar escenas que pusieron a prueba su compromiso actoral. En una de ellas, Marty Mauser sufre una humillación por parte de Milton Rockwell, personaje de O’Leary. A pesar de que el joven actor tuvo la opción de usar un doble, se negó a hacerlo.
El compromiso extremo de Timothée Chalamet en el rodaje de ‘Marty Supreme’
Timothée Chalamet se preparó durante años para dominar los entresijos del ping-pong. Prefirió entrenar al nivel de un atleta profesional antes de recurrir a un doble para algunas de las escenas más desafiantes, donde debía hacer tiros con efectos especiales. Además, el actor también se negó usar un doble para grabar una de las tomas más vergonzosas de la cinta.
Durante una charla con Variety, Kevin O’Leary recordó que Chalamet mostró un compromiso absoluto al interpretar a Marty Mauser. En una de las escenas, el deportista se enfrenta a Milton Rockwell, un poderoso empresario que tiene un papel clave en su camino hacia el campeonato mundial de ping-pong.
Milton obliga a Marty a recibir una serie de azotes en el trasero con una raqueta de ping-pong, en un momento que se convierte en un punto de quiebre para el personaje. Chalamet se negó a usar un doble en la escena, que se iba a grabar con una raqueta falsa, para suavizar los golpes. Sin embargo, fue imposible, ya que se rompía con los impactos, así que al final se usó una raqueta de verdad.
“Cuando llegó el momento de darle una paliza, había un doble. [Chalamet] no lo hizo. Dijo que lo haría él mismo. No quería que otro idiota fuera inmortalizado”.
Fue una de las escenas más desafiantes de la película de A24, pues requirió más de cuarenta tomas. O’Leary reveló que tardaron horas en rodarla y que estuvieron en el set hasta las 4:00 de la mañana. “Le estaba dando una paliza de verdad”, recordó el empresario.
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Así fue la química de Timothée Chalamet y Kevin O’Leary
Uno de los aspectos más llamativos de la película fue la participación de Kevin O’Leary. El empresario conectó con Timothée Chalamet en pantalla gracias a la intensidad y autenticidad con la que interpretó a Milton Rockwell. El actor debutante le dio su personalidad directa y sin filtros al personaje, por lo que sus escenas tuvieron un realismo que sorprendió incluso al propio Chalamet.
En declaraciones para ‘Indie Wire’, las estrellas de ‘Marty Supreme’ revelaron cómo fue su química durante el rodaje. Chalamet confesó que enfrentarse a O’Leary fue una experiencia única, ya que el empresario no intentaba suavizar su carácter ni fingir ser alguien distinto.
“No me extralimito al decir que, sinceramente, fue realmente refrescante estar con alguien que no se hacía pasar por villano. No fue refrescante desde un punto de vista vital, sino artístico. Pensé: ‘Guau, esto es una pasada. Estoy interpretando esta secuencia frente a alguien que literalmente es así’”.
El actor añadió que esa dinámica ayudó a que Marty se sintiera más real y con motivos para luchar. O’Leary defendía el punto de vista de Milton incluso fuera de cámara, asegurando que Marty lo estaba “molestando durante toda la película” sin pagar las consecuencias.
¿Qué dice la crítica de ‘Marty Supreme’?
La crítica ha recibido ‘Marty Supreme’ con entusiasmo. Los expertos destacan tanto la dirección de Josh Safdie como la intensidad de Timothée Chalamet. Peter Debruge de ‘Variety’ calificó la actuación de sublime por su “intensidad singularmente agotadora”, mientras que David Ehrlich de ‘IndieWire’ la describió como “legendaria” y comparó la película con ‘Diamantes en bruto’.
Justin Chang de ‘Los Angeles Times’ escribió que la película “es un torbellino narrativo que combina la crudeza del cine callejero con la precisión de un thriller deportivo”. Subrayó que Chalamet logra transmitir tanto la obsesión como la fragilidad de Marty.
En ‘The Hollywood Reporter’, David Rooney señaló que la cinta “es un retrato vibrante de ambición y autodestrucción”, y destacó la química inesperada entre Chalamet y Kevin O’Leary como uno de los elementos más electrizantes del filme.
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