La actriz Mara Wilson escribió recientemente un ensayo donde recuerda que era vista como un objeto sexual por hombres mucho mayores cuando era una jovencita. La protagonista de Matilda decidió alejarse de los reflectores conforme creció y ahora alza su voz para señalar algo que debería ser sentido común para Hollywood: sexualizar a menores de edad no es algo aceptable, ni ayer, ni hoy, ni nunca. Que Hollywood permita que esto suceda mientras se dice defensor de los derechos de la mujer es una contradicción enorme y nefasta.
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La ahora autora escribió la semana pasada para Elle que en su momento recibía correspondencia de hombres quienes le lanzaban piropos respecto a su físico cuando tenía 15 años. Tan pronto llegó a la pubertad parecía que estaba bien que hombres mayores hablaran de ella y su cuerpo como si fuera una dama madura. Wilson, ahora de 30 años, trae a colación esto debido a que el clima en Hollywood parece no haber cambiado mucho y a propósito de que Millie Bobby Brown, Eleven en [Temporada] Stranger Things, aparece en medios que desean mostrarla en un contexto reprobable: como si fuera un “sex symbol”, a pesar de que la actriz tiene solo 13 años.
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Wilson escribió lo siguiente:
En una foto que la vi lucía vestida como una jovencita cualquiera y en el pie de foto decía que la actriz ha crecido mucho frente a nuestros ojos. ¿Ese comentario a qué viene? ¿No puede una joven actriz vestirse con algo que le siente cómoda porque, al parecer, ya es válido referirse a ella como una mujer madura y con ello hacer aceptable acosarla?
Con los escándalos de acoso en Hollywood lo que señala la actriz hace mucho eco, pero su crítica en esta ocasión es hacia los medios que no tiene reparo en presentar a actrices menores de edad como mujeres con vidas sexuales activas.
Wilson continúa:
Gracias a las redes sociales los medios de comunicación se han democratizado en el sentido de que cualquiera puede escribir lo que sea y será leído. Creo que muchos aún no se dan cuenta de que ahora todos formamos parte de los medios de un modo u otro.
Ya que hablamos de redes, varios han señalado su disgusto con una revista que no dudó en poner a Eleven en la lista de actrices que han hecho la televisión “más sexy que nunca”.
Ella tiene 13, repito, 13. No es una mujer sexy, es una niña. Vergüenza debería de dar a estas publicaciones por sexualizarla.
Hollywood tendrá que reflexionar respecto a su hábito de decir una cosa y hacer luego exactamente lo opuesto. Recientemente, un video apareció muestra a una joven y alcoholizada Demi Moore besando a un joven actor de 15 años, cuando ella tenía 19. El hecho ha sido también reprobado en redes y ha puesto en evidencia la hipocresía de muchos “luchadores sociales” que, de haber ocurrido a la inversa, habrían acusado ferozmente a cualquier actor mayor por besar a una actriz menor. De manera similar, Finn Wolfhard, también estrella de Stranger Things, ha sido acosado por una mujer mayor y solicitó en redes sociales que la gente lo respete y a sus compañeros.
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