Este martes, Disney y NBCUniversal presentaron una demanda federal contra Midjourney, una de las plataformas más populares de generación de imágenes con IA. La acusación es directa: violación masiva de derechos de autor. Según los estudios, el modelo de negocio de Midjourney se basa en permitir que millones de usuarios generen imágenes que reproducen, sin permiso, personajes y propiedades intelectuales de las principales franquicias del cine y la televisión.
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La denuncia, presentada ante el Tribunal de Distrito del Centro de California en Los Ángeles, es el primer caso de este tipo iniciado por estudios de la talla de Disney y NBCU. En sus propias palabras, “La piratería es piratería, y que una imagen o video infractor sea creado con IA o con otra tecnología no lo hace menos infractor”.

¿Qué imágenes generadas por IA están en el centro del conflicto?
La demanda incluye ejemplos concretos. Entre ellos, imágenes generadas por usuarios de Midjourney que replican personajes como Deadpool, Wolverine, Iron Man, Spider-Man, el Hulk, Darth Vader, Yoda, R2-D2, C-3PO, Chewbacca, Elsa y Olaf de ‘Frozen‘, Buzz Lightyear de ‘Toy Story‘, Lightning McQueen de ‘Cars‘, los personajes de ‘Los Simpson‘, Hipo y Chimuelo de ‘Cómo entrenar a tu dragón‘, y los Minions de ‘Mi villano favorito‘.
Disney y NBCU sostienen que “Midjourney vende suscripciones a consumidores, con precios de entre 10 y 120 dólares al mes, para que puedan ver y descargar copias y derivados de los valiosos personajes protegidos por derechos de autor de los demandantes”
Y agregan: “Al servirse de las obras protegidas por derechos de autor de los demandantes, y luego distribuir imágenes (y próximamente videos) que incorporan y copian descaradamente a los famosos personajes de Disney y Universal —sin invertir ni un centavo en su creación— Midjourney es el ejemplo por excelencia de aprovechamiento ilegítimo de los derechos de autor y un pozo sin fondo de plagio”. En su denuncia, también advierten que la empresa ha ignorado los pedidos para cesar su actividad.
“Antes de presentar esta demanda, los demandantes pidieron a Midjourney que detuviera el robo de su propiedad intelectual. En lugar de hacerlo, Midjourney ha seguido lanzando nuevas versiones de su servicio de generación de imágenes que, según su fundador y director ejecutivo, generan imágenes infractoras de mayor calidad”, se lee en el documento judicial.
¿Por qué este caso podría cambiar las reglas del juego?
Midjourney fue fundada en 2021 y en 2023 reportó más de 200 millones de dólares en ingresos. Se estima que a septiembre de 2024 contaba con 21 millones de usuarios. Su crecimiento ha sido vertiginoso, y su modelo es símbolo de una industria emergente que explota grandes cantidades de datos (incluyendo obras protegidas) para entrenar algoritmos generativos.
En la demanda presentada por Disney y NBCU podemos leer: “La conducta de Midjourney se apropia indebidamente de la propiedad intelectual de Disney y Universal, y amenaza con desestabilizar los incentivos fundamentales de la ley de derechos de autor en EE.UU., que impulsan el liderazgo estadounidense en cine, televisión y otras artes creativas”. También califican el modelo de la empresa como un “pozo sin fondo de plagio”.
Desde Disney, el vicepresidente legal Horacio Gutiérrez sostuvo que la base de sus contenidos son décadas de inversión, creatividad e innovación, y que esas obras solo pueden existir gracias a la protección que brinda la ley de derechos de autor. Aunque la compañía se muestra optimista sobre el potencial de la inteligencia artificial como herramienta creativa, rechaza tajantemente su uso para apropiarse de obras ajenas sin autorización, y considera que el carácter ilícito no cambia solo porque intervenga una tecnología nueva.

En la misma línea, Kim Harris, principal consejera legal de NBCUniversal, argumentó que la demanda busca defender tanto la inversión del estudio como el trabajo de los artistas que dan vida a sus contenidos. Para ella, el acto de copiar sin permiso sigue siendo un robo, sin importar si es cometido por una persona o facilitado por un algoritmo.
¿Es este solo el comienzo de la guerra legal contra la IA?
Aunque esta es la primera demanda de gran escala presentada por estudios como Disney y Universal, no es el único frente abierto. Diarios como The New York Times, editoriales, sellos discográficos y artistas visuales también han iniciado acciones legales contra empresas que utilizan sus obras como insumo para sistemas de IA sin permiso ni compensación.
La Writers Guild of America ya había solicitado el año pasado a los ejecutivos de los principales estudios que tomaran medidas legales contra este fenómeno, acusando a empresas como Midjourney de haber “saqueado la propiedad intelectual generada durante décadas por trabajadores sindicalizados” para entrenar sus modelos de IA.
Con información de Variety.
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