En un momento fructífero de su carrera, con películas como ‘The Housemaid‘ en cines, Amanda Seyfried habló sobre una inseguridad personal que ha marcado parte de su carrera: el baile. Durante una mesa redonda con otras actrices, la intérprete explicó que, pese a su experiencia en musicales y a la imagen de soltura que suele proyectar en pantalla, bailar sigue siendo una fuente constante de incomodidad para ella. Sus declaraciones vienen a cuento por su trabajo en ‘The Testament of Ann Lee‘.
También te puede interesar: ‘The Housemaid’: Amanda Seyfried revela qué fue lo más difícil e inquietante de filmar sus escenas
¿Por qué Amanda Seyfried dice que bailar siempre le provoca incomodidad?
En la conversación, Seyfried fue directa al describir su relación con el movimiento y la coreografía. Al hablar del trabajo físico y musical que implicó ‘The Testament of Ann Lee‘, reconoció que bailar nunca ha sido algo natural para ella. “Siempre me siento muy incómoda bailando”, afirmó, con palabras que resonarán en muchos que no tienen el talento del baile.

La actriz explicó que su incomodidad no proviene de la presión externa, sino de una percepción interna que la acompaña desde hace años. Incluso recordó que esa misma inseguridad estuvo presente durante el rodaje de ‘Mamma Mia!’, una de las películas más asociadas a su faceta musical. En ambos casos, señaló que el malestar es algo que vive en silencio, ya que en el set no hay tiempo para detenerse a procesar dudas personales.
También lee: ‘The Housemaid’ es mejor que el libro, dice la autora, y los críticos elogian la actuación de Amanda Seyfried
Seyfried describió ese diálogo interno con una crudeza poco habitual en entrevistas promocionales. “soy un pedazo de mi**da, soy un pedazo de mi**da, ¿ya estamos rodando?”, dijo al explicar lo que pasa por su cabeza justo antes de empezar una escena. Contrario a la percepción del público de que es una gran bailarina, ella siente que no sabe bailar.
La preparación como única forma de enfrentar el miedo
Pese a esa inseguridad, Amanda Seyfried aclaró que no se lanza al vacío sin red. Para ella, la diferencia clave entre proyectos musicales y otros géneros es el tiempo de preparación. En el caso de ‘The Testament of Ann Lee’, destacó que contar con un periodo amplio de ensayos fue determinante para poder asumir el reto.
La actriz señaló que, cuando una película implica música y movimiento, existe una estructura que obliga a preparar cada escena con antelación, algo que considera un alivio. Según explicó, su mente no responde de manera automática al movimiento corporal, por lo que necesita ese proceso previo para sentirse mínimamente segura frente a la cámara.
También hizo una distinción importante entre el tipo de baile que exige este proyecto y el que realizó en ‘Mamma Mia!’. Mientras que aquella producción apostaba por coreografías más reconocibles y asociadas al musical tradicional, en ‘The Testament of Ann Lee’ el movimiento es más intuitivo y expresivo, menos ligado a pasos cerrados. Esa diferencia, explicó, le permitió relacionarse de otra manera con el cuerpo, aunque sin eliminar del todo la incomodidad.
Inseguridad, intimidad creativa y el momento actual de su carrera
Las palabras de Amanda Seyfried se dieron en una mesa redonda junto a otras actrices que atraviesan distintas etapas de sus carreras. En ese contexto, la intérprete reflexionó también sobre la autonomía creativa y las relaciones de largo plazo en el cine. Para ella, crecer como artista implica aceptar la vulnerabilidad y trabajar desde ahí, incluso cuando eso supone exponerse al ridículo o a la vergüenza.

Seyfried defendió la idea de construir vínculos creativos cercanos y duraderos, convencida de que mezclar trabajo con relaciones de confianza puede dar lugar a proyectos más profundos. En su opinión, ese tipo de intimidad artística no elimina la inseguridad, pero sí crea un espacio donde es posible atravesarla sin paralizarse.
Este enfoque ayuda a entender la coherencia entre sus declaraciones y su filmografía reciente. Lejos de evitar aquello que le incomoda, Amanda Seyfried ha seguido aceptando papeles que la obligan a enfrentarse a sus propios límites, ya sea a través de números musicales exigentes o de personajes emocionalmente complejos. Al admitir que bailar sigue siendo un desafío, la actriz desmonta la idea de una carrera basada en la seguridad absoluta y refuerza una imagen más honesta: la de una intérprete que avanza a pesar del miedo, no porque este haya desaparecido.
Con información de The Hollywood Reporter.
No te vayas sin leer: Amanda Seyfried dice que el socialismo es ‘una idea hermosa’ y opina que EU es un país dividido