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por Jacobo Antúnez

Durante más de cuatro décadas, las telenovelas mexicanas han moldeado la cultura popular en América Latina y otros rincones del mundo. Y si hay un elemento que las define tanto como sus historias de amor imposibles y sufrimiento interminable, es la figura de la villana. Capaces de despertar odio, fascinación y hasta empatía, estas antagonistas no solo impulsaban la trama: eran, muchas veces, el verdadero motor de la historia. En el universo de Televisa y TV Azteca, las villanas se ganaron su lugar a base de frases memorables, traiciones perfectamente calculadas y vestuarios tan icónicos como sus personalidades. Algunas eran frías y manipuladoras; otras, explosivas y vengativas. Muchas tenían motivaciones complejas —ambición, venganza, poder— y un rostro que se convirtió en sinónimo de maldad televisiva. Lo interesante es que, con el tiempo, estos personajes pasaron de ser simples obstáculos para la protagonista a convertirse en figuras centrales. El público empezó a disfrutar sus apariciones, a repetir sus frases, a imitar sus gestos. Algunas incluso trascendieron la pantalla chica para transformarse en íconos virales, reapareciendo en parodias, comerciales y homenajes inesperados. Este recorrido no pretende solamente nombrar a las más recordadas, sino rescatar lo que las hizo únicas. Más allá del odio que inspiraban en su momento, muchas de ellas terminaron siendo las favoritas del público, y sus intérpretes alcanzaron el reconocimiento y la inmortalidad televisiva gracias a estos papeles. Por eso, si creciste viendo telenovelas o simplemente te interesa saber quiénes marcaron época en el melodrama mexicano, este top 10 es para ti. Reunimos a las villanas más icónicas de Televisa y TV Azteca entre 1980 y 2010, junto con un detalle poco conocido de cada una que probablemente no sabías. Prepárate para reencontrarte con personajes inolvidables, en una selección que celebra la maldad, el drama y el talento detrás de las mejores antagonistas de la pantalla nacional.