Edgar Wright y otros directores comparten las escenas más escalofriantes de la historia del cine

Todos tenemos una película de terror que no veríamos solos y los directores de cine no son la excepción. A pesar de que conocen los mecanismos del arte cinematográfico, los cineastas no olvidan que, ante todo, son espectadores y como tal recuerdan aquellas películas que los marcaron y que les provocaron una fuerte impresión, en este caso, las películas de terror. Ahora que el género ha tenido un revival destacado resulta pertinente retomar los testimonios que diversos directores compartieron en un artículo publicado en The Guardian donde relatan cuáles son las secuencias que ellos consideran las más escalofriantes en la historia del cine.

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De Edgar Wright al director de culto Panos Cosmatos, aquí las secuencias y los motivos que las hacen las más aterradoras y perturbadoras.

Suspiria, Dario Argento - Escena de apertura

Elegida por Edgar Wright

En el cine de terror, las historias giran en torno a una normalidad que se va trastocando por eventos paranormales o satánicos conforme avanza la trama, pero Suspiria - 90%, la obra cumbre de Dario Argento, cambió esta regla, bien lo decía el lema que acompañó el póster para Estados Unidos: “lo más aterrador que los últimos 12 minutos de esta película son sus primeros 92”. Y sí, en Suspiria todo es siniestro desde el inicio, no solo por la inquietante canción de cuna compuesta por Goblin o por los fuertes colores ya que, desde que la estudiante estadounidense Suzy Bannion (Jessica Harper) llega al aeropuerto de Múnich, empiezan a ocurrir cosas misteriosas; el estilo visual, los colores, la iluminación, etc., todo se conjunta para crear la impresión de que el mismo país es inherentemente maligno. Pero la parte más turbia ocurre cuando Suzy llega a la academia de danza y ocurre la muerte de Patricia enredada en cables y colgada del techo, dejando un vitral roto.

Edgar Wright calificó esta secuencia como una “manera extremadamente operística de abrir una película”, además reveló que Dario Argento tiene mucha influencia en su cine: los asesinos encapuchados de Hot Fuzz: Super Policías - 91% son herencia de sus personajes; el tráiler que hizo para la película de Quentin Tarantino, Grindhouse - 83%, es un homenaje al tipo de horror del maestro italiano. En Una Noche En El Fin Del Mundo - 89% y Baby - El Aprendiz del Crimen - 93%, el director utilizó la iluminación al estilo de Argento, es decir, con dos colores primarios opuestos en el mismo marco, específicamente el rojo y azul.

Por el Lado Oscuro del Camino, David Lynch - Escena de la fiesta

Elegida por Alice Lowe

Indiscutiblemente es una de las escenas más espeluznantes de Por el Lado Oscuro del Camino - 60%: Fred Madison (Bill Pullman) está en una fiesta cuando un hombre misterioso se le acerca; este hombre tiene la cara muy blanca. El ambiente de la fiesta es normal hasta que, de repente, todo se queda en silencio y el hombre misterioso (interpretado por Robert Blake) dice: “nos hemos conocido antes, ¿no es así?”, Fred dice que no y le pregunta en dónde cree que se conocieron. El hombre misterioso dice: “en tu casa, ¿no te acuerdas? De hecho, ahora mismo estoy allí”. Acto seguido Fred llama a su casa y le contesta el hombre misterioso. Para la directora y actriz Alice Lowe esta escena tiene un aspecto de pesadilla:

No sabes por qué es aterradora: no hay explosiones, no hay prótesis, todo está hecho con sonido y edición. En realidad, es la escena en sí la que me da miedo. Hay algo demoníaco al respecto: sientes que puedes recibir una llamada de este tipo inmediatamente después. Te hace sentir sucio de forma intangible.

La directora de Prevenge - 95% añade que la escena transmite esas sensaciones por la iluminación y la manera en la que David Lynch muestra aquello que aterrador, especialmente al hombre misterioso quien siempre está sonriendo: “Lynch tiene esa compresión de que, en las pesadillas, hay una línea extraña en la que sientes ganas de reír incluso cuando estás asustado.”

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El Bebé de Rosemary - Escena: Rosemary traicionada por su médico

Elegida por Karyn Kusama

Karyn Kusama, directora de películas como Girlfight - 87%, Diabólica Tentación - 42%, La Invitación - 88% y recientemente Destrucción - 81%, protagonizada por Nicole Kidman, recuerda que vio por primera vez El Bebé de Rosemary - 98% cuando tenía 20 años:

Al principio, para mí, era más sobre el concepto de un culto satánico, sobre la idea de dar a luz al hijo de Satanás. Pero lo he estado reinterpretando a lo largo de los años y ahora la veo como una parábola de abuso doméstico y lo que significa estar asociada con hombres que quieren poder a expensas de una mujer.

De acuerdo con Kusama, la escena donde Rosemary (Mia Farrow) es traicionada por su médico es un reflejo de esa idea, además de que la considera la escena más aterradora a pesar de que, cinematográficamente, está ejecutada de forma convencional para los parámetros del cine de terror:

Parte de lo que hace que la escena sea tan rica y ambigua es que, en este punto, Rosemary está bastante lejos; ella siente que la están volviendo loca, que un culto satánico realmente persigue a su bebé. Es una tradición de películas que aprecio especialmente, el thriller paranoico en el que sientes que todos están tratando de atraparte, de una manera que parece irracional y que tus miedos están justificados. […] Lo que hace que El Bebé de Rosemary sea un clásico tan perdurable es que, al final, Lucifer es una especie de pensamiento tardío: el verdadero horror proviene del esposo de Rosemary y sus vecinos y médicos, quienes la fallan. Ese es un tipo de terror mucho más auténtico para todos nosotros, especialmente las mujeres.

Posesión Satánica, Jack Clayton - Escena: la institutriz caminando por la casa en la noche

Elegida por Anna Biller

La directora de The Love Witch - 96%, Anna Biller, recuerda que vio por vez primera Posesión Satánica - 95% a la edad de 20 en la televisión y afirmó que esta adaptación de la novela de Henry James , Otra Vuelta de Tuerca, le dejó una fuerte impresión:

Cuando la vi de nuevo recientemente estaba devastada. La película te prepara para identificarte con la institutriz, pero luego te das cuenta de que, de hecho, puede estar volviéndose loca. Hay casos de locura en mi familia, así que estar dentro de la cabeza de un personaje demente es realmente aterrador para mí. Pero al mismo tiempo me sentí increíblemente emocionado por la técnica cinematográfica.

Biller señala que el director Jack Clayton conjugó todas las herramientas cinematográficas para elaborar la secuencia en que la institutriz Miss Giddens, interpretad por Deborah Kerr, camina por la casa durante la noche y empieza a escuchar voces y risas:

A través de su uso del sonido, las voces se sienten como si estuvieran en su cabeza y no en la casa, lo que resalta la idea de que se está volviéndose loca. Gran parte del horror se manifiesta en la iluminación, la forma en que su rostro y su camisón salen de la oscuridad es muy claustrofóbico. El trabajo de la cámara es muy fluido, en lugar de cortar, le da sensación de estar adentrándose de la casa. Y gran parte del horror viene de los ojos de Deborah Kerr , de su actuación.

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The Exorcist III, William Peter Blatty - Escena en el pasillo del hospital

Elegida por Panos Cosmatos

Para el director de películas de culto como Beyond the Black Rainbow - 50% y la reciente Mandy - 92%, protagonizada por Nicolas Cage, Panos Cosmatos, la secuencia más escalofriante ha sido la de The Exorcist III cuando se ve a una enfermera haciendo sus rondas en el hospital, entrando y saliendo de las habitaciones en busca de ruidos extraños. Cosmatos vio esta película durante su adolescencia y recuerda lo siguiente:

Estaba sentado en la parte trasera del cine, y recuerdo que esta ola de miedo físico recorrió a la audiencia desde la primera fila hasta donde yo estaba. Fue realmente escalofriante, en parte porque la película hasta este momento tenía una sensación realista y de repente surge este momento de horror absurdo de la nada. Lo que lo hace tan efectivo es el impecable momento: comienza con la audiencia anticipando un salto de miedo, pero lo mantiene el tiempo suficiente para que la anticipación se disipe, luego regresa, luego se disipa nuevamente y cuando el susto ocurre, se siente realmente sorprendente.

Panos Cosmatos dice no considerarse a sí mismo como un cineasta especializado en el suspenso, aunque sus películas han incluido secuencias de suspenso y pone de ejemplo a William Peter Blatty , quien hizo esta ejecución con gran precisión en esta cinta.