Consejos de David Lynch para cineastas

La perspectiva de cada director difiere muchas veces con su personalidad, gustos y por supuesto el género que manejan. Directores de renombre han compartido su experiencia en el proceso de crear una película, es decir, cómo han desarrollado sus habilidades. Ya lo han hablado otras figuras importantes del cine como Clint Eastwood. Lo más valioso para nosotros resulta que un director de renombre comparta consejos para los futuros cineastas, consejos que podrían aplicarse a cualquier otra disciplina del Arte y bien pueden pasar por una verdadera cátedra.

En este caso, David Lynch, desde su incursión al cine, se ha vuelto referente a pesar de la evidente influencia en otras esferas artísticas, las cuales muchas veces le han valido malas críticas. La mayoría de sus películas se consideran clásicas del cine estadounidense. Es un director que además del cine ha producido series de televisión exitosas como Twin Peaks (al aire desde 1990). Ahora, si de largometrajes hablamos, a pesar de que han pasado once años desde su último trabajo (El Imperio - 72%), David Lynch es recordado por el estilo surrealista de sus filmes, llenos de pasajes oníricos como se nota en Cabeza de Borrador - 91% de 1977; el tratamiento de la historia visto en El Hombre Elefante - 90% de 1980 o bien su manejo de las emociones en conflicto en Terciopelo Azul - 93% de 1986, siendo las anteriores sus principales trabajos junto con Sueños, Misterios y Secretos - 81%.

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Los consejos que resumiremos aquí nos sirven para comparar las perspectivas con otros directores que también han hablado sobre su desenvolvimiento en el cine. Los tips y anécdotas pertenecen a una charla entre Lynch y Charlie Rose en el año 2000 y una conversación con Paul Holdengräber en el 2014 en la BAM Howard Gilman Opera House. Disponibles en la red, ambos videos mencionan algunos de los aspectos que se podrían tomar en cuenta para adoptar un estilo Lynchiano, veamos:

Toma las ideas como llegan

Lynch habla del paciente manejo con que un cineasta debe tomar ante las ideas que le llegan; no sólo buscar inspiración. El lenguaje del director interpreta la inspiración como algo que existe independientemente de uno mismo –como si se tratase de una señal de televisión que llega hasta la pantalla de tu casa-, es por ello que Lynch insta a sus seguidores a no trabajar mucho en “dar sentido” a esas ideas, al menos no en las ideas, muchas veces simplistas y sobre-racionales de la lógica narrativa de Hollywood.

La percepción que se tiene con respecto a que las ideas necesitan una explicación directa, o de hacerlas sensatas, limita significativamente explorar las posibilidades creativas de su expresión final. Tal pareciera que las ideas existen fuera del espacio/tiempo, sin su propia lógica o razón de ser; ¿por qué socavar de esa cualidad cuando se hace cine?

Falla con tus propias películas

Había críticas muy malas [hablando de Twin Peaks: Fire Walk with me]. Yo me encontraba bajo una mala racha durante ese tiempo y simplemente no salió bien, pero me encantó la película y cuando realizas algo en lo que crees, aunque no vaya bien, está bien. Si tú cedes como lo hice en Dunas y no sale bien, realmente mueres.

En nuestra opinión, las palabras de Lynch con respecto a las malas críticas recibidas, está siendo un poco duro consigo mismo. El yuxtaponer dos de sus fracasos fílmicos como lo fueron Twin Peaks: Fuego Camina Conmigo - 62% y Dunas - 56%, Lynch explica cómo algunos fracasos son más virtuosos que otros. Fracasar con la película que amas, con la película que querías ver, es distinto a que suceda con una película que se te escapa, que otros quieren que dirijas o que está ausente de tu corazón; ese fracaso, resulta más difícil porque esa película, realmente, no existía para servir a nadie.

Abraza tu intuición, experimenta conforme avanzas

La discusión de Lynch con Una Historia Sencilla - 96% hace hincapié en que el trabajo de la emoción en el cine es totalmente intuitivo: “La película te habla”: confiar en sus instintos y en el trabajo que siente esté correcto. Aprender a aprovechar esa emoción y dejarse llevar hasta donde quiera, ya que esto puede llevarlo a direcciones inesperadas, o lo que entrevistadores como Charlie Rose ven como “escapatorias” a su típico trabajo. En otras opiniones, Clint Eastwood cree en apegarse al libreto, sin embargo, toma a las ideas que puedan surgir desde un “no cerrarse” para llegar a interpretarlas y por supuesto, evolucionar la producción que se tiene en marcha.

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Usted no posee el significado de una película

David Lynch es un director que renuncia a cualquier sentido que pueda someter el significado de sus películas. La mayor parte de ellas, son bastante profundas y personales, no obstante, el director no intenta imponer un significado a los demás y no por ello resulta mantener algún grado de ambigüedad artística; más bien, Lynch recae en que no posee el significado de una película en el sentido de que las películas no llegan del mismo modo a una persona que a otra. Lynch cree en que imponer su lectura perpetuaría una falsa sensación en la audiencia, así como que socava el trabajo creativo y emocional del espectador cuando interiorizan e interpretan el cine. En sus propias palabras:

Sabes, es difícil decirlo. Siempre digo lo mismo: cada espectador es diferente. La persona entra en un mundo y tiene una experiencia; un tanto de lo que les hace reaccionar, ya está dentro de ellos. Cada espectador obtiene de la película algo diferente. Así que habrá algunas personas a las que Eraserhead les habla y otras que no les dice nada en lo absoluto. Es sólo la forma en que va… me gusta tener público capaz de formar una opinión propia sobre lo que significa algo y tener sus propias ideas sobre las cosas. Pero al mismo tiempo, nadie hasta donde yo sé, ha visto una película como yo la veo. La interpretación de lo que se trata nunca ha sido mi interpretación.

En conclusión

La carrera de Lynch ha mostrado un enfoque disciplinado al manejar la idea de trabajar mucho un proyecto que pueda interrumpir en la profundidad creativa que reside en él. No quiere decir que su obra carezca de sentido o sus películas se traten de una secuencia de imágenes aleatorias, sino que mantiene sobrias las interpretaciones convencionales en el mundo cinematográfico y que esto sirva para explorar un sin número de posibilidades. El director lo hace a través de un manejo de la inspiración, las emociones y la modesta interpretación durante el proceso de su producción cinematográfica, eso es lo que significaría adoptar un estilo Lynchiano. Finalmente, uno de los más grandes consejos que nos da este director, es que el cine está destinado a ser grande, tanto en ideas, estilo o en la forma en que se presenta. Mantener al cine grande, dice; y creemos en ello.

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