París Puede Esperar: Top de críticas, reseñas y calificaciones

A pesar de tener una vida ligada al cine, de estar casada con una de sus máximas leyendas como es el cineasta Francis Ford Coppola, responsable de la portentosa trilogía El Padrino - 100% y, por consiguiente, ser la madre de los directores Roman Coppola y Sofia Coppola, Eleanor Coppola se había mantenido un tanto apartada de la industria y es que, más allá de realizar esporádicos documentales, Eleanor no había dado señas de aspirar a una carrera como directora, sin embargo, es ella quien nos demuestra que nunca es tarde para hacer cine con París Puede Esperar - 45%, su primera película de ficción que ha rodado a sus 80 años y que viene a ser el más grande logro de una película que se queda en la capa más superficial de sus personajes y del viaje por Francia, entregándonos una cinta que es simplemente una postal más de las exuberancias y delicias que ha dado el país europeo al mundo entero.

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Desconociendo si el guión lleva implícita alguna vivencia personal de su directora y guionista, Paraís Puede Esperar gira en torno a Anne (Diane Lane), una atractiva mujer adulta que lleva muchos años casada con un exitoso productor de cine (Alec Baldwin), pero que la tiene muy olvidada. Inesperadamente, un día se encuentra viajando en coche desde Cannes a París con un socio de su marido (Arnaud Viard), un francés apasionado de la vida y lo que debería ser un viaje de siete horas se convierte en un viaje lleno de aventuras que le dará a Anne un nuevo sentido a su vida.

Estrenada en el Festival de Cine de Toronto en 2016 donde tampoco consiguió llamar la atención, París Puede Esperar logra capturar al espectador gracias a los hermosos paisajes y los manjares de los que se deleita el par de aventureros, los cuales van desde los vinos, quesos, chocolates y panes, hasta las prolongadas comidas en los más finos restaurantes. Un bonito tour por la campiña y los escaparates turísticos de la región que para nada se complementa con su argumento, el cual se aprecia carente de ideas mientras se arropa de personajes poco interesantes. Una agridulce comedia dramática que ha encontrado en sus experimentados actores el punto de apoyo necesario para que la película no se hunda por completo y lograr, aunque sea por menos, hacerla simpática y disfrutable. A continuación, hacemos una capitulación de algunos comentarios que ha despertado París Puede Esperar en la crítica especializada.

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Peter Debruge de Variety dijo:

Puede que sea algo generacional, pero el predicamento de Anne toma por grato el nivel de privilegio que no es menos que desagradable.

Jeannette Catsoulis de New York Times aseguró:

No es más que un indulgente regodeo. Para cuando la cinta termine, lo único que estarás buscando será un antiácido.

Katie Walsh de Los Ángeles Times fue más esperanzadora y escribió:

Coppola hábilmente cambia el enfoque de la mujer detrás de un gran hombre y se pregunta quién es esta mujer, cómo entiende el mundo y qué es lo que le importa. Es totalmente su historia con una rara perspectiva

.

Randy Cordova de Arizona Republic señaló:

París Puede Esperar" se siente más como una adaptación cinematográfica una guía de viaje que una verdadera película.

Diego Batlle de La Nación comentó:

Una amable, pero no demasiado inspirada road movie gastronómica y turística con cierto sesgo romántico y mucho pintoresquismo.

Amanda Adame de Cine Premiere expresó:

El tiempo que acapara la comida y los placeres terrenales lo resienten los personajes y el arco narrativo de la película, la cual nunca logra ofrecernos una narrativa sólida y un desenlace contundente.

Dan Schindel de Paste Magazine apuntó:

París Puede Esperar puede ser un buen entretenimiento, pero es una excursión cinematográfica vacía.

Alissa Wilkinson de Vox advirtió:

Desafortunadamente, esta no es una buena película. Sí, es disfrutable si te gustan el vino fino, los bellos paisajes y los escalofríos del coqueteo.

Sam C. Mac de Slant Magazine indicó:

La película te deja con la impresión de que su historia toma lugar en un mundo elitista y sellado herméticamente del mundo.

Fionnuala Halligan de Screen International dijo:

Una suave, pequeña y encantadora historia, llena de comida, flores y buen vino.