Robert Pattinson: Crepúsculo hizo que perdiera mi identidad

El mayor temor de la mayoría de los actores es quedarse encasillados con un personaje, pero éste choca con el afán de algunos por ganar fama. Robert Pattinson tuvo que luchar contra esto dos veces después de trabajar en franquicias tan grandes como Harry Potter y la saga Crepúsculo. Cuando todo el mundo lo reconocía como Cedric Diggory por Harry Potter y El Cáliz de Fuego - 88%, el inglés tuvo la oportunidad de quitarse el traje de mago para ponerse uno de un vampiro no tan tradicional, sino más moderno.

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Tras convertirse en una estrella para el público adolescente, Robert Pattinson consiguió la fama que muchos actores querrían tener, pero al tratarse de una franquicia basada en un libro (es decir que tenía que cumplir exactamente con lo que el personaje creado por J.K. Rowling pedía), esto le afectó de alguna manera como actor. Con el auge de la saga, el rostro del intérprete de Edward Cullen, al igual que el de Kristen Stewart y Taylor Lautner, se veía por todas partes. Según palabras del mismo Pattinson en una discusión con Jamie Bell (Billy Elliot - 85%) para Variety, esto tuvo gran afectación en su ego.

Cuando algo se vuelve realmente grande, te das cuenta de lo pequeño que eres, como en donde estás cuando empiezas a actuar y te sientes como un pez gordo cuando sólo estás haciendo algo pequeño. Mi ego era mucho más grande cuando comencé. Entonces empiezas a perder el control de muchos aspectos diferentes de tu vida y también del trabajo, especialmente cuando haces secuelas de algo. No importa lo que pienses: a) ya se ha escrito en un libro, y b) el tono ya se ha configurado y la máquina ya está en movimiento. Es aterrador cuando pierdes tu sentido de identidad.

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Sin duda, gracias a las franquicias los actores consiguen mayor reconocimiento en el mercado, pero en realidad no son del todo libres a la hora de crear a sus personajes; de alguna manera sólo hacen lo que se les pide y punto. En proyectos más pequeños es más fácil que un actor se relacione de manera más íntima con su personaje, experimentando con los tonos del mismo así como con su construcción. Cuando se forma parte de una película tan grande en el sentido comercial, el mayor interés del actor debe ser frente a la prensa.

De acuerdo a las palabras de Robert Pattinson, ser famoso y seguir siendo uno mismo requiere de un equilibrio que en ocasiones es muy fácil de romper. Es evidente que el actor encontró su lugar con las películas en las que ha trabajado en los últimos años, pues aunque su cara ya no sea la portada de 20 revistas en un mes, sus proyectos han demostrado su calidad como actor, y prueba de ello son The Childhood of a Leader - 88%, Z, La Ciudad Perdida - 87% y, la más reciente, Good Time: Viviendo al Límite - 90%, misma con la que sorprendió a los críticos.

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