Grandes, extraños y fantásticos crossovers cinematográficos antes de Avengers: Infinity War

Buena parte del atractivo de Ready Player One: Comienza el Juego - 78% y Avengers: Infinity War - 79% para el público es ver a diferentes personajes, algunos de otras franquicias —como en la cinta de Spielberg—, convivir en el mismo entorno. Para lograr algo así tienen que sortearse mil y un obstáculos legales de derechos de autor. Por supuesto, tener una buena historia que contar también ayuda para justificar la reunión de tantas figuras de la cultura popular. El cine lleva años haciendo esto y desde la década de los 40 hacía inusuales combinaciones, muchas entre comediantes como Abbott y Costello y monstruos clásicos como Drácula.

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Desde el crítico francés de festival que acusa a la gente de haber sufrido una lobotomía de parte de Hollywood hasta el fan de Batman vs Superman: El Origen de la Justicia - 27% que siente la imperiosa necesidad de escribir constantemente en Facebook que la película es una "obra maestra incomprendida", nadie podrá estar indiferente al estreno de la nueva cinta de Marvel Studios. Avengers: Infinity War - 79% promete ser la madre y padre de todas las grandes batallas de efectos especiales, el blockbuster definitivo. Sin importar queJames Cameron diga que este tipo de cine ya cansó (porque aparentemente hacer cinco secuelas de Avatar - 83% no va a cansar a nadie), lo cierto es que Marvel ha redefinido el blockbuster contemporáneo.

Vale entonces la pena repasar crossovers del pasado que han intentado diferentes industrias fílmicas con varios personajes. Los hay de diferentes tonos, presupuestos y niveles de calidad, pero comparten el deseo de entretener sin grandes pretensiones convocando al público para darle una gran aventura con personajes que en otras circunstancias no se habrían encontrado. No son clásicos ni tienen que serlo, sólo rebanadas de sana y, en muchos casos, muy delirante diversión fílmica.

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King Kong vs. Godzilla - 33%

Los dos monstruos gigantes más famosos del cine no tardaron mucho en verse las caras luego de que ambos tuvieran dos secuelas olvidables en la década de los 30 y 50, respectivamente, así que enfrentarlos era la forma perfecta de revivirlos y, además, hacerlos debutar en colores. Ishirô Honda fue el encargado de dirigir el encuentro entre estos titanes, aunque sobra decir que la cinta se tomó enormes libertades en cuanto a la mitología de ambos seres. Kong tuvo que crecer varios metros para poder tener un encuentro más parejo con el lagarto prehistórico. De igual manera, su apariencia careció del detalle que tuviera en sus encarnaciones en stop-motion, ya que Toho optó por poner a otro actor en botarga, tal como se hacía con Godzilla. Para aquel entonces este último aún era visto como un villano, así que, contrario a lo que digan rumores de la red, no hay versiones alternativas del final. Kong es el ganador, aunque para la versión de Hollywood de 2020 puede que el resultado cambie.

House of Frankenstein

Luego de años de producir cintas con sus monstruos clásicos, era lógico e inevitable que Universal decidiera reunirlos a todos en una película. El monstruo de Frankenstein, el Hombre Lobo y Drácula juntos, aunque no necesariamente revueltos, en una cinta que no es precisamente un dream match tras otro como varios esperarían. Boris Karloff aparece, pero no como el personaje creado por Mary Shelley, sino como un científico. No es el mejor filme de horror del estudio, pero es un paso obligado para los fans de estos personajes.

Zatoichi Meets the One-Armed Swordsman

Dos iconos del cine de artes marciales se encuentran en esta entrada en la saga de aventuras de Zatoichi, masajista y espadachín ciego del Japón feudal interpretado por Shintaro Katsu. La cinta juega de manera ingeniosa con las diferencias de idioma y cultura entre los dos personajes, donde una serie de intrigas y confusiones harán que tengan que enfrentarse. Jimmy Wang Yu interpreta al espadachín manco que tanta fama le diera en Oriente. Si bien las peleas no serán espectaculares para los estándares del cine de acción actual, lo cierto es que la trama es un relato de aventuras muy bien armado que cualquier fan de este tipo de cine puede disfrutar.

The Dragon Lives Again

Luego de la inesperada muerte de Bruce Lee, los productores de cine de Oriente estaban desesperados por exprimir la imagen del famoso artista marcial y recurrieron a la cuestionable práctica de usar a otros actores y expertos en kung fu para encarnar versiones espurias del inmortal dragón. Las cintas eran de baja calidad, con argumentos absurdos y escenas de pelea de cuestionable calidad. Este subgénero fue conocido como bruceploitation y entre las docenas de cintas que se realizaron en los 70 surgió un delirio absoluto llamado The Dragon Lives Again. Aquí, Bruce Lung (o Leung según la traducción en turno) interpreta a Bruce justo en el momento en que llega al mundo de los muertos, donde tendrá que enfrentar a James Bond, El Hombre Sin Nombre, Zatoichi, Drácula, El Padrino y otros personajes del cine, quienes aterrorizan a los pacíficos habitantes del reino de Hades, entre ellos Popeye el Marino. ¿Leyes de derechos de autor? Eso aquí no aplica y es que la cinta, dedicada a los fans de Bruce Lee en todo el mundo, es por igual ingenua que chatarrera; lo que no tiene de hechura le sobra en cuanto a ganas de mandar la lógica al carajo y hacer que el respetable se divierta.

3 Dev Adam

El universo cinematográfico Marvel podrá presumir muchas cosas: romper récords de taquilla, tener un promedio de crítica siempre favorable, haber popularizado el cine de superhéroes y más, sin embargo, difícilmente podrá decir que ha tenido a un héroe mexicano y menos enfrentado a un Spider-Man convertido en villano. En Turquía esto ocurrió en una cinta titulada 3 Dev Adam (3 Grandes Hombres), donde el enmascarado de plata y Capitán América hicieron equipo para enfrentar a un Spider-Man de grandes cejas y adicto a robar joyas y a torturar mujeres. El cine popular turco de aquella época no se andaba por las ramas a la hora de hacer dementes fusiones fílmicas. No había barrera cultural o ley de derechos de autor que se pusiera en su camino para hacer versiones de Star Wars, Rambo y otras cintas de Hollywood. Definitivamente, la mejor encarnación en pantalla del arácnido, este sí con presencia imponente y no de milenial patiño de otro superhéroe.

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